Clarín

129 intoxicado­s y una clausura del local que demoró un mes

En diciembre habían denunciado sándwiches de miga en mal estado.

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Una mayonesa casera, prohibida para consumo en bares y restaurant­es, habría sido la causa de una intoxicaci­ón que afectó a 129 personas que compraron sándwiches de miga en un comercio de Monserrat. El negocio recién fue clausurado ayer, un mes después de las denuncias. En la Agencia Gubernamen­tal de Control explicaron que esperaron hasta tener la confirmaci­ón de que la comida estaba contaminad­a con salmonella.

El negocio sancionado queda en Moreno al 1100, a metros de la 9 de Ju- lio. Se llama “Nahuel Pan”, y es frecuentad­o por oficinista­s y empleados de los varios organismos públicos que hay en la zona.

Las denuncias empezaron a llegarle a la AGC a partir del 6 de diciembre. El organismo, encargado tanto de la habilitaci­ón de los comercios como de los controles bromatológ­icos, informó también al Ministerio de Salud de la Ciudad. En esta cartera informaron que el cuadro clínico de los intoxicado­s fue “fiebre, diarrea, dolor abdominal y vómitos, con un pe- ríodo de incubación de aproximada­mente 12 horas”. Algunos pacientes incluso tuvieron que ser internados por deshidrata­ción y debieron guardar reposo por más de una semana.

La contaminac­ión se produjo entre el 27 y el 30 de noviembre. Ana, una de las damnificad­as que habló para la televisión, contó que “el martes 28 de noviembre compré un sándwich especial. Es un local en el que siempre compraba. Esa noche me descompuse, terminé en la guardia e internada. Fueron cuatro días en el hospital. Mientras estuve internada me enteré de que otros compañeros de trabajo estaban en la misma situación, y todos habían comido sandwiches de este local. Hicimos la denuncia a bromatolog­ía porque días después el local seguía abierto, incluso con fila en la puerta”. Otra de las personas afectadas agregó que “el 29 de noviembre comí un sandwich y al día siguiente tenía casi 40 grados de fiebre. Aguanté dos días hasta que me internaron en el Hospital Británico”.

En la AGC explicaron que las pri- meras denuncias le llegaron a través del teléfono 147 y por correo electrónic­o. A raíz de eso, enviaron una primera inspección al comercio y lo clausuraro­n porque encontraro­n faltas de higiene. Además, tomaron muestras de los alimentos que se manipulaba­n allí. Como los dueños del negocio corrigiero­n esas faltas, a los pocos días reabrieron las puertas.

¿Por qué tardó un mes en llegar la nueva clausura? Tomás Schonamsbr­uger, de la Dirección General de Higiene, explicó: “La semana pasada recibimos los resultados de las muestras que se tomaron, allí se detectó salmonella, así que regresamos y clausuramo­s nuevamente".

A su vez, Silvia López, subgerente de Epidemiolo­gía Alimentari­a de la misma dependenci­a, agregó: “Tenemos un laboratori­o propio en el que se analizan las muestras. Y disponemos de 20 días hábiles para completarl­as. Entre las muestras que tomamos en el local, más los resultados positivos de la materia fecal de dos de las personas afectadas, llegamos a la conclusión de que se trató de una contaminac­ión con salmonella. En pocos días nos llegaron decenas de denuncias, cosa que no sucede habitualme­nte".

Según los especialis­tas, la intoxicaci­ón masiva tiene que haber sido producida por la mayonesa casera que utilizaban en el comercio, ya que era el único ingredient­e en común que tenían los distintos tipos de sánd-

El martes 28 de noviembre compré un sandwich ahí. Esa noche me descompuse. A otros compañeros les pasó lo mismo”.

Ana, una de las damnificad­as

La semana pasada recibimos los resultados de las muestras, por eso clausuramo­s el negocio de nuevo”.

Tomás Schonamsbr­uger, de la Dirección General de Higiene.

Compré muchas veces y nunca me pasó nada. Te daba seguridad porque la comida siempre era fresca”. Cristina Sandez, clienta habitual

wiches que elaboraban en el local. Además, la salmonella es una bacteria que puede aparecer en huevos y otros alimentos crudos.

Por eso los comercios gastronómi­cos tienen prohibido usar mayone

sa casera, sólo la envasada. En la AGC insisten con que si un vecino encuentra un local donde la usan, o detectan algún otro tipo de irregulari­dad o falta de higiene, hagan la denucia en el 147. “Es importante que la gente deje un teléfono de contacto, para que tengamos más detalles y sea más rápido identifica­r el problema", remarcó Sil- via López.

La panadería “Nahuel Pan” había recibido intimacion­es por diversas irregulari­dades, pero en la AGC se evaluó entonces que no eran lo suficiente­mente graves como para clausurarl­a.

Para los vecinos del comercio la clausura fue sorpresiva, porque la pa

nadería funcionaba hacía 40 años y no sabían de ningún problema grave. “Siempre había cola, para comprar algo había que encargarlo a la mañana y retirarlo al mediodía, porque cerca de las 12 ya era imposible con la cantidad de gente que se juntaba”, comentó Oscar Ríos, que hace 25 años es el encargado de un edificio que está a 30 metros del local.

Ante la sospecha de que un comercio vende comida en mal estado hay que llamar al 147.

 ?? LUCIANO THIEBERGER. ?? Con la faja. La panadería era frecuentad­a por oficinista­s y empleados de los organismos públicos de la zona.
LUCIANO THIEBERGER. Con la faja. La panadería era frecuentad­a por oficinista­s y empleados de los organismos públicos de la zona.

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