Un ferretero se defendió a tiros de un asalto: mató a un ladrón

Le dispararon para robarle pero él tuvo más puntería que los ladrones: les acertó un tiro en la cabeza a cada uno. El primero murió y el otro estaba internado anoche en grave estado. Se sospecha que un tercer cómplice que aguardaba afuera huyó en una camioneta. Así fue como terminó ayer al mediodía un asalto en una ferretería en Pilar.

En el local Dewalt, ubicado en el kilómetro 40 de la Panamericana, hubo al menos cinco tiros. Eran las 12.45 de ayer cuando dos ladrones simularon que iban a comprar dos máquinas pero quisieron llevárselas a punta de pistola. Pero el dueño también estaba armado: hubo un tiroteo y los asaltantes terminaron baleados.

El ladrón que sobrevivió se encuentra internado en grave estado en el Hospital Sanguinetti de Pilar. El comerciante y un em- pleado que lo acompañaba resultaron ilesos.

Para los investigadores, los ladrones habían preparado el golpe al menos un día antes. Para eso, el miércoles fueron al local y, con la excusa de que iban “a abrir un lavadero de autos”, solicitaron un presupuesto por una hidrolavadora de $ 34.000 y una aspiradora industrial de unos $ 11.000. Ayer regresaron al negocio con el papel en la mano y dos valijas. “Venimos a comprarlas”, anunciaron, según dijo una fuente del caso a Clarín.

El empleado salió del enrejado que protege el mostrador para preparar las máquinas, que estaban exhibidas en el salón. Cuando estaba desatándolas, escuchó que uno de los falsos clientes le gritaba: “¡Dame la máquina!”. Los dos ladrones habían sacado de sus valijas una pistola calibre 9 milimetros cada uno.

El empleado se quedó paralizado. El otro asaltante se dirigió al dueño, que estaba hablando por teléfono en un taller ubicado en el fondo. “¡Cortá hijo de puta!”, le ordenó el ladrón, pensando que estaba llamando al 911.

El dueño cortó, pero sacó una pistola que tenía en el negocio y allí co- menzó la balacera. No se sabe aún quién tiro primero.

Pero sí quedó probado que los ladrones tiraron, ya que a su lado se encontró una vaina 9 milímetros. Del lado del comerciante se hallaron cuatro. Según los voceros, mientras disparaba el hombre gritó: “¡Andate, andate!”. De los tiros que realizó el ferretero, dos fueron directo a la cabeza de los asaltantes. Otro impactó en el vidrio del local y el cuarto se sospecha que salió por la puerta, que estaba abierta.

Cuando terminó el tiroteo, el empleado, que estaba en el piso, escuchó quejidos y volvió a meterse detrás del enrejado. Los gemidos eran de uno de los ladrones, que todavía estaba vivo. El otro murió en el acto. El dueño de una pinturería vecina se asomó y, al ver a los dos heridos, volvió a su local y llamó al 911.

Al lugar fueron móviles de la comisaría 7° y el caso quedó a cargo de la fiscal María Inés Domínguez, de la UFI N° 3 de Pilar. Una ambulancia trasladó al herido al hospital Sanguinetti y anoche seguía grave. El fallecido, de apellido Leiva, tenía varios antecedentes por robos y había salido de la cárcel hacía poco.

En tanto, los investigadores trataban de dar ayer con una camioneta tipo utilitaria en la que se habría movido un tercer cómplice. En el momento del hecho fue vista por testigos yéndose a toda velocidad.

La ferretería contaba con cámaras de seguridad pero no funcionaban. El comerciante quedó en libertad pero fuentes judiciales adelantaron a Clarín que será imputado por “homicidio agravado por armas”. Él apelará a la “legítima defensa”. ■

Un asaltante murió en el acto y el otro quedó herido de gravedad, con una bala en la cabeza.