Más sobre el Papa y su visita esquiva a la Argentina
• Por más que le busquemos excusas de todo tipo, para los ciudadanos argentinos que nos emocionamos con el nombramiento Papal de Bergoglio, sentimos frustración a la falta de visita que él mismo está dilatando a nuestro país. Es evidente que todo es una consecuencia política. Está bien que el Papa, como ser humano común, tenga sus predilecciones partidarias, pero él, como jerarca eclesiástico, se debe a toda la humanidad cristiana sin distinciones de ideas políticas. Se habla continuamente de que debemos cerrar las grietas y consolidar la unidad de los argentinos. ¿El Papa, con su actitud, contribuye a cerrar las grietas o las agranda? Esta pregunta se la hace la mayoría del pueblo argentino. ¡Qué desilusión que no se le ocurra cruzar la Cordillera de los Andes.
Aldo Graziadei aldogra38@gmail.com
• Con motivo de viaje del Papa a Chile, hay muchos argentinos y argentinas que se quejan de que el Santo Padre no visite nuestra Patria. Yo comprendo que los que no sean creyentes se quejen pensando en que eso le vendría muy bien a la Argentina, como un motivo de publicidad. Pero los que creemos en la existencia de Dios, en realidad debemos estar contentos con que el Papa visite nuestra Patria. Su Patria. Eso es una buena señal, pues nos indica que la Ar- gentina está en buenas manos y que Dios piensa que el Gobierno no necesita del apoyo papal para sacar el país del atraso y pobreza que hemos acumulado en estos últimos 60 años.
Carlos Ochoa Blanco calveto8ab@gmail.com