Reinscripción de Ingresos Brutos: multas en la Provincia de hasta $ 60.000
El 31 vence el plazo. Cerca de 1,2 millón de inscriptos deben regularizar sus datos. Vidal bajó la alícuota.
Los contribuyentes que no se reempadronen en Ingresos Brutos de la provincia de Buenos Aires antes del 31 de enero afrontarán multas de hasta $60.000. Las multas se aplican en caso de que no presenten la imprescindible declaración jurada antes del plazo de vencimiento.
La Agencia de Recaudación de Bue- nos Aires (ARBA) avanza con el reempadronamiento de 1.200.000 inscriptos, que deben actualizar los datos sobre su actividad económica ante el fisco. Pero todavía quedan cerca de 290.000 sin regularizar su situación.
La Provincia resolvió en octubre pasado crear un nuevo nomenclador, con más de 1.000 códigos, que incluye nuevas actividades. Hasta el momento, unos 530.000 contribuyentes fueron reempadronados de manera automática y más de 320.000 realizaron el trámite, por lo que no tendrán inconvenientes.
El resto debe completar sus obligaciones en la web del organismo o dár- selo a su contador para que lo efectúe. De lo contrario, una vez vencido el plazo, el Código Fiscal provincial contempla sanciones que van desde $ 400 a $ 60.000.
“Los no reempadronados no van a poder realizar la declaración jurada y la sanción son multas para los que no cumplan sus deberes formales en tiempo y forma”, confirmaron desde ARBA a Clarín.
El monto de la multa depende del tamaño de la empresa y su facturación. En la mayoría de los casos aplican el mínimo.
Pero cuando las infracciones son reiteradas y se trata de un gran contribuyente, puede llegar a sufrir la pe- na máxima.
A diferencia del inmobiliario y automotor, Ingresos Brutos es un impuesto “autodeclarado”: el contribuyente debe presentar -antes del 31 de enero- su declaración jurada y facturación registrada. Luego, con esos datos, el fisco determina la alícuota y el valor del impuesto.
En el fisco bonaerense reconocen que las multas surtieron efecto. “En 2015 el 50% los contribuyentes no presentaba la declaración jurada, y hoy se redujo a un 30%”, detallaron.
El gravamen es clave: representa el 75% de la recaudación provincial. El año pasado sumó $151.734 millones, con una suba interanual de casi 32%,
impulsada por el sector inmobiliario y automotriz. Ahora en 2018, se espera una merma de $10.000 millones.
En línea con las metas del ministro de Economía de la Nación, Nicolás Dujovne, la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal puso en marcha el 1 de enero la baja gradual de alícuotas del gravamen. El objetivo es reducir la presión impositiva de 5,8 a 5,3% del Producto Bruto geográfico.
La estrategia de Vidal apunta a disminuir el peso de impuestos considerados “distorsivos”, como Ingresos Brutos, en favor de la industria, ciertos rubros de comercio y las empresas del campo, a la vez que incrementa la carga sobre los patrimoniales, como inmobiliario y automotores.
Estos dos tributos gravan directamente a las personas y el año pasado aumentaron 1,4% interanual su participación en la torta fiscal del distrito. Ahora, con el aumento previsto del inmobiliario urbano y rural, la Provincia espera sumar $4.500 millones.
Pero el aporte a las arcas bonaerenses de ese tributo como del automotor sigue siendo limitado. ■