El Gobierno se sumó a un debate en Washington sobre la crisis de Venezuela
La Cancillería mandó a diplomáticos a una reunión convocada por el Consejo de Seguridad de los EE.UU.
Funcionarios del Gobierno participarán este viernes 26 de una reunión en Washington con altos asesores de la Casa Blanca para analizar nuevos pasos a seguir en torno a la relación con Venezuela, que también este martes se llevó buena parte de una reunión del llamado Grupo de Lima, en Santiago de Chile, en la que participó el vicecanciller Daniel Raimondi. A diferencia de Estados Unidos y Unión Europea, la región no ha entrado en el esquema de sanciones, si- no que optó por el aislamiento del régimen de Nicolás Maduro.
A la capital estadounidense viajará la subsecretaria de Asuntos Globales, Paola Di Chiaro, en representación de los funcionarios que se encuentran con Mauricio Macri en la gira por Rusia, Davos y París. La reunión en DC será con el influyente Juan Cruz, un veterano miembro de la CIA que hoy dirige la sección para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional. De ahí que en la misma pueda aparecer el general Herbert Raymond McMaster, el asesor del Consejo. En la reunión estarán presentes representantes de Brasil, Colombia, Mexico, Panamá, Perú. En resumen, los países cuyos presidentes participaron de un desayuno con Trump el 19 de septiembre pasado, en el marco de la Asamblea General de la ONU, a la que el presidente Mauricio Macri pegó un faltazo y envió a su vice, Gabriela Micetti.
Sobre el final de este martes, el Grupo de Lima -creado en medio de la crisis de Unasur y que integran también Brasil, Canadá, Chile, México y otros pero no Venezuela- emitió un comunicado de rechazo al anuncio de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de que las elecciones presidenciales en el país caribeño, que legalmente debían realizarse en diciembre de 2018, se efectuarán durante el primer cuatrimestre, lo que se baraja ya para antes del 30 de abril. Una jugada más para perpetuar al régimen de Nicolás Maduro, que este martes confirmó su intención de buscar su reelección.
Para el Grupo de Lima, en cambio, el adelantamiento del calendario electoral "imposibilita la conducción de elecciones presidenciales democráticas, transparentes y creíbles" conformes a los estándares internacionales. El grupo pidió frenar los actos de violencia, respaldó la legi- timidad de la Asamblea Nacional - desplazada por a polémica constituyente -pidió la liberación de los presos políticos y manifestó preocupación por la crisis humanitaria y la situación de los desplazados en la frontera.
Estados Unidos ha impuesto varias rondas de sanciones personales contra funcionarios del régimen. La semana pasada fueron los cancilleres de la Unión Europea los que adoptaron también castigos y prohibiciones contra los responsables de la represión y de la situación política en la Venezuela. Desde el interbloque de Cambiemos, la presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de Diputados, Cornelia Schmidt Liermann emitió un comunicado de apoyo a las sanciones por parte de la UE. Pero nada debilita al régimen y menos aún con una oposición aún dividida, endeble. Fuentes de la Cancillería explicaron a Clarín una situación por demás curiosa: varios países del Grupo de Lima, entre ellos Argentina, "no pueden aplicar sanciones desde aquí sino lo pide la justicia o un organismo internacional del que forme parte el país como el Consejo de Seguridad". ■