Acusaciones cruzadas entre San Lorenzo y Boca para reavivar la polémica
El titular xeneize invitó a su par a realizar una denuncia a la AFA. Elizondo defendió al árbitro Trucco.
Hay fuego cruzado en la Superliga. De Boedo a la Boca. De la Bombonera al Nuevo Gasómetro. De Viamonte 1366 a las oficinas azulgranas. El caliente empate entre San Lorenzo y Boca todavía genera chispazos. Y a las polémicas que se levantaron en el Bajo Flores, con la pelota como protagonista, ahora le siguieron las palabras de varios de los dirigentes más importantes del fútbol argentino, que elevaron aún más la temperatura.
Matías Lammens -presidente de San Lorenzo- fue el primero en alzar la voz. “Sigo viendo las imágenes del partido y estoy muy enojado, siento que hubo muchos errores que nos perjudicaron. Me parece que el trámite hubiera sido diferente si no se cometían errores tan determinantes, era un partido tan importante. No vemos ninguna conspiración, pero sí manifestamos nuestra preocupación. El arbitraje fue muy malo y San Lorenzo se vio claramente perjudicado”, dijo el titular del club de Boedo. A repasar: si bien el dirigente consideró justa la expulsión de Facundo Quignón, puntualizó en el gol en offside de Carlos Tevez, en la tarjeta roja mostrada a Gabriel Rojas y en una supuesta infracción de Gabriel Gudiño sobre Emmanuel Mas, en la que el volante de San Lorenzo ni siquiera tocó al lateral izquierdo de Boca. “No se mide con la misma vara”, se quejó.
En el medio, Horacio Elizondo -el responsable de la Dirección de Arbitraje Nacional- dio su versión: “La posición adelantada de Tevez fue muy complicada y era una jugada para VAR, por eso no lo veo como un error. La expulsión de Rojas fue la equivocación más grande, pero también era jugada para la asistencia por video. Estuvo bien la expulsión de Quignón y creo que Silvio Trucco y la terna arbitral hicieron un gran primer tiempo”, comentó en radio Rivadavia.
Pero la bronca de Lammens siguió: “Están todos hablando de cuidar el producto me parece que así no se cuida para nada”, dijo. Y, ante la consulta de Clarín, tampoco anduvo con vueltas sobre la presencia de Claudio Tapia -presidente de la AFA- en el festejo del cumpleaños de Tevez, horas después del partido en el Nuevo Gasómetro. “Quiero ser medido porque tengo responsabilidad dirigencial. Pero no puedo dejar de manifestar mi molestia por ver al presidente de AFA en el cumpleaños de un jugador de Boca. Cuando uno tiene un cargo tan importante los lugares adónde va implican un mensaje, un gesto, que no pasa desapercibido Justo el día de un arbitraje que perjudica a San Lorenzo y favorece a Boca”, sostuvo. ¿Qué respondió Tapia? “Carlos es amigo mío, ¿por qué no voy a ir? Es un evento de mi vida privada, no hay nada malo en eso”, remarcó en Radio Rivadavia, al mismo tiempo que puntualizó sobre el partido: “Nadie quiere que un árbitro se equivoque pero se puede equivocar. Son seres humanos. Tenemos que trabajar en las cosas que pueden cambiar el fútbol, pero cuando el resultado deportivo no es el que esperamos salimos a decir cosas que no sirven y eso no está bien, esas cosas son las que hay que cambiar”.
Daniel Angelici -presidente de Boca- no se quedó de brazos cruzados. “Me parece una barbaridad dudar de la honestidad de los árbitros. No creo que uno salga a perjudicar a un equipo con intención. No me pareció que eso pasara en el partido. Creo que se equivocó para las dos, como a veces se equivocan para uno o para otro. Ahora, si tiene pruebas o sospechas, que haga la denuncia en los Tribunales de la AFA”, disparó Angelici en Télam. Y fue por más: “Yo lo invité para que sea parte del Comité Ejecutivo de la AFA y no quiso. Encima, es el vicepresidente de la Superliga y no va a una sola reunión”.
Las polémicas del partido mutaron en acusaciones cruzadas. Todos, en definitiva, siguen teniendo la guardia alta. ■