Un innovador estudio vincula a los alimentos ultraprocesados con el cáncer
Investigaron 105.000 historias clínicas y hallaron que un 10% más de estas comidas estaba ligado con algún tumor.
“Los alimentos ultraprocesados, manufacturados en fábricas con ingredientes desconocidos en la cocina hogareña, pueden estar relacionados con el cáncer, de acuerdo con un amplio e innovador estudio.
Los alimentos ultraprocesados incluyen fideos de sopa, comidas listas para almacenar, tortas y productos de confitería que contienen una larga lista de aditivos, preservantes, saborizantes y colorantes, al igual que, elevados niveles de azúcar, grasa y sal. Ahora representan la mitad de todos los alimentos adquiridos por las familias que comen en sus casas en el Reino Unido.
Un equipo dirigido por investigadores de la Sorbona en París, observó las historias clínicas y los hábitos alimenticios de casi 105.000 adultos, registrando su ingesta usual de 3.300 productos alimenticios diferentes.
Encontraron que un aumento del 10% en la cantidad de alimentos ultraprocesados en la dieta estaba relacionado con un incremento del 12% en algún tipo de cáncer. Los investigadores también buscaron ver si había aumentos en tipos de cáncer específicos y encontraron un incre- mento del 11% en el cáncer de mama. No hubo ningún aumento significativo en cáncer de colon o de próstata.
“Si se confirmaran en otras poblaciones y entornos, estos resultados sugerirían que el consumo de alimentos ultraprocesados, podría impulsar una carga creciente de cáncer en las próximas décadas”, dice el trabajo publicado en el British Medical Journal.
Francia es uno de los pocos países que ya advierte a su población en contra de los niveles elevados de alimentos ultraprocesados en la dieta basándose en el “principio de precaución”, dijo Mathilde Touvier, autora principal del estudio. Estos alimentos ya fueron relacionados con la obesidad, aunque la asociación con el cáncer es nueva.
“Los resultados son muy fuertes, muy consistentes. Aunque tenemos que ser cautelosos, es el primer estudio. No debemos ser alarmistas. Estos resultados necesitan ser confirmados en otros estudios prospectivos”, subrayó la investigadora.
Alimento ultraprocesado es una definición creada por un grupo de científicos dirigido por el profesor Carlos Monteiro en Brasil, país que también tiene pautas dietarias que sugieren que deben consumirse en la menor cantidad posible.
El sistema de clasificación, denominado Nova, coloca a los alimentos en grupos: crudos o mínimamente procesados, que incluyen semillas, fruta, huevos y leche; ingredientes culinarios procesados como las aceites y la manteca; alimentos procesados que incluyen vegetales envasados y pescado enlatado y quesos; y los ultraprocesados, que son “formulaciones hechas en su mayoría o completamente a partir de sustancias derivadas de alimentos y aditivos”.
Los críticos de los alimentos ultraprocesados dicen que el procesamiento reduce la mayor parte de los nutrientes, aunque Touvier no cree que el valor nutricional bajo de las galletitas, dulces y tortas sea la causa del mayor riesgo de cáncer que vieron, según evaluó con su estudio.
La científica agregó que necesitan investigar más para descubrir si algún aumento en el desarrollo del cáncer se debe a la carga elevada de azúcar, grasa, sal o a los aditivos. “Tal vez en el futuro tendremos una idea acerca de si una o dos moléculas son el problema y no todos los alimentos ultraprocesados”.
Su equipo ahora tiene una base de datos de todos los aditivos en los alimentos, por nombre y marcas comerciales. En los próximos años, dijo, “podremos cuantificar la exposición crónica de la población a los aditivos en los alimentos”. Podrán estudiar sus efectos solos y en combinación con otros aditivos, ella cree, para descubrir si hay un “efecto cóctel”.
“El enfoque de categorizar los patrones dietarios que dependen del alimento procesado industrialmente con relación al riesgo de enfermedad es novedoso aunque probablemente necesite ser refinado antes de que se pueda traducir en un consejo dietario práctico”, opinó Tom Sanders, profesor emérito de nutrición y dietética en King’s College de Londres. ■
Traducción: Patricia Sar
Los resultados son fuertes. Pero debemos ser cautelosos, es el primer estudio”. Mathilde Touvier, investigadora