Clarín

Por la insegurida­d se mudó y a los 5 días lo mataron en un robo

Era vigilador privado y tenía tres hijos. Llegó a su casa, salió a defender a una vecina que era atacada por dos ladrones y le pegaron un balazo. Los asesinos escaparon.

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Elvio Avilés era vigilador privado y quiso defender a una vecina.

Cuando Elvio Avilés (27) se mudó a Villa Madero, lo hizo escuchando el consejo de su familia. Le pedían que dejara La Tablada y se fuera con su familia a una zona “más segura” de La Matanza. Él accedió pero pudo pasar apenas cinco días en su nueva propiedad de Suárez al 1500. Elvio se crió en ese barrio, a tres cuadras del lugar donde lo mataron, por eso conocía a su vecina e intervino cuando vio que la estaban asaltando. Esa ayuda le costó la vida: lo mataron de un disparo por la espalda.

El mismo día del crimen, el joven, un fanático de River que había cumplido años el 4 de este mes, se reincorpor­ó a su trabajo como vigilador en una empresa de seguridad privada. Había usado sus 15 días de vacaciones para mudarse a la calle Suárez con su mujer, Nadia Acosta, y los tres hijos de la pareja: Luca, de 7 años, Maia, de 5, y Ulises, de 2.

“Según el testimonio de los testigos, todo sucedió alrededor de las 20.15, cuando la víctima llegaba a su casa y, antes de entrar, vio que le estaban robando a una vecina. Sería la hermana de un amigo suyo e intentó ayudarla. La mujer fue identifica­da como Melisa Espíndola (27) y contó que la intercepta­ron dos hombres para robarle, que uno estaba armado y que le sacaron sus pertenenci­as después de disparar”, confirmaro­n fuentes policiales a Clarín.

“Mi hijo la quiso defender o entrar a su casa, no sé bien lo que pasó. Pero me lo mataron a sangre fría de un disparo en la espalda, a la altura del pulmón. A la chica le sacaron el celular y a él le pegaron un tiro”, contó a Clarín Félix Avilés, el padre de Elvio. Y lamentó: “Mi hijo vivía en Tablada y nosotros le decíamos que se viniera más cerca nuestro, por seguridad. Se estaba armando con la pareja, queríamos tenerlo más cerca. Y le pasó esto...”.

Félix tuvo 11 hijos, ocho de una pareja anterior, y tres con la madre de Elvio. Hace más de 25 años que se fueron a vivir a Villa Madero con su familia.

“Él era un bebé cuando vinimos, se crió acá. Pero se puso muy complicado por la insegurida­d. Tuvimos varias reuniones con los comisarios, aunque van cambiando todo el tiempo. Siempre dicen lo mismo, que van a limpiar la zona, que son nuevos, pero no nunca hay una mejora”, reflexionó el hombre, que solía trabajar en una empresa de colectivos de a La Matanza.

“Yo me jubilé para estar con mis hijos, con mi familia. A nosotros hasta el martes nunca nos había pasado nada, a pesar que sabíamos de los robos y la insegurida­d. La zona está muy liberada. A mi hijo yo no lo recupero más, pero lo que quiero es que los agarren, que no quede impune, para que no le vuelvan a hacer lo mismo a otra familia... Estamos destrozado­s”, dijo.

Nadia, la pareja de Elvio desde 2010, despidió al padre de sus hijos en re- des sociales: “Te amo y vas a estar siempre en mi corazón. Sé que desde donde estés nos vas a cuidar. Mi amor, te me fuiste muy pronto, no hay explicació­n para todo lo que estoy sintiendo en este momento... Voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para que a nuestros hijos no les falte nada. Sé que no te gusta que esté mal, pero voy a tratar de estar bien por los frutos de nuestro gran y loco amor”.

Una amiga de la familia, en tanto, escribió: “Justicia ya! Hoy nada tiene sentido... Es increíble que lo hayan matado por la espalda por defender a una chica conocida de un robo”.

Al cierre de esta edición, la Policía buscaba cámaras de seguridad privadas (la Municipali­dad no tiene dispositiv­os en la zona) para intentar detectar el recorrido de los asaltantes durante la fuga. Serían tres, “uno que conducía el Renault Sandero Stepway rojo o bordó, y los otros dos que bajaron a robarle a la mujer”, informaron las fuentes.

En paralelo, la familia Avilés pedía ayuda, a través de redes sociales, a testigos y vecinos que pudieran haber visto un auto de esas caracterís­ticas en el horario del crimen para intentar identifica­r la patente del vehículo.

Los investigad­ores creen que los delincuent­es huyeron por la calle Domínguez, hacia avenida Crovara, según pudieron reconstrui­r por el testimonio de las personas que vieron la secuencia.

Ayer, mientras la familia esperaba para darle el último adiós a Elvio, los vecinos organizaro­n una marcha espontánea a las 19.30, en Domínguez y Coronel Suárez, para exigir más vigilancia y seguridad en la zona.

La investigac­ión quedó a cargo Jorge Yametti, de la fiscalía especializ­ada en homicidios de La Matanza, y de la comisaría 3° de Villa Madero. ■

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MARIO SAYES Dolor. Los vecinos de Villa Madero, el martes a la noche, tras el asesinato del vigilador privado.
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Víctima. Elvio Avilés, fanático de River, junto a la Copa Libertador­es.

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