River visita al Flamengo con la necesidad de dejar atrás su crisis
Será en el Nilton Santos y a puertas cerradas. El equipo viene jugando mal y Gallardo no le encuentra la vuelta.
Llueve en Río de Janeiro. Y las nubes oscurecen el bello paisaje que se divisa entre las playas, el mar y los morros. El clima, evidentemente, no es ajeno a la visita de River a esta ciudad. Está en sintonía con el difícil momento futbolístico que atraviesa el equipo de Marcelo Gallardo, que viene de sufrir una derrota contra Vélez en la Superliga que pegó duro, porque dejó al desnudo el flojo rendimiento de la mayoría de los jugadores. Pero esa lluvia no intimida. Para algunos aquí hasta parece un augurio. Por la tarde aparecieron algunos rayos de sol y en River sueñan con que esta noche ante Flamengo, a las 21.45, en el Olímpico Nilton Santos, bajo la atenta mirada del Cristo Redentor, haya una resurrección futbolística.
Lo necesita River. Lo necesitan Gallardo y los jugadores. Es tiempo de revancha en Núñez. Y la Libertadores le ofrece la posibilidad de sacar de
El DT y sus jugadores intentarán hacerle frente esta noche a una crisis que se agudizó.
adentro toda la bronca que todavía mastica por la dolorosa eliminación en la última edición contra Lanús.
Públicamente el discurso se direccionó a que lo de aquella noche ya había pasado, pero puertas adentro reconocen que las heridas aún no fueron sanadas. Las esquirlas se sienten. “Todos sentimos ese golpe y nos está costando mucho recuperarnos. Esa es la realidad. Esperemos que las cosas cambien después de este partido”, señaló un importante dirigente mientras caminaba por las instalaciones del hotel Gran Hyatt, el lugar que River eligió para alojarse en la zona de Barra de Tijuca, la más exclusiva de Río de Janeiro.
Desde aquí, Gallardo y sus jugadores intentarán hacerle frente a una crisis futbolística que se agudizó. Es que River está en un laberinto y le cuesta encontrar la salida. El propio entrenador lo reconoció el sábado luego de la derrota en el Amalfitani.
"Hay que ponerle el pecho al viento que se nos viene en contra. Es difícil encontrar las respuestas a este momento. Soy el responsable de que el equipo funcione. Pero necesitamos un partido que nos permita recuperar la confianza, soltarnos. Es una
realidad que estoy preocupado. No hay nada que ocultar, no hay que mentirle a la gente. Tenemos que seguir trabajando. Hay que redoblar esfuerzos, tenemos que cambiar y encontrar las respuestas y el partido del miércoles (por hoy) puede ser un punto de partida”, analizó el Muñeco.
¿Qué lo lleva al multicampeón DT de River a creer en que la resurrección futbolística puede comenzar esta noche? En primer lugar, quizás, apele al éxito logrado durante su ciclo en el plano internacional. Sacando la estrepitosa caída contra Lanús,
el Muñeco tiene una muy buena performance en torneos continentales. Obtuvo cinco títulos y ostenta un porcentaje de efectividad del 63 % (de 57 partidos ganó 31 y empató 15) superior al de torneos locales, en los que consiguió el 56% contabilizando Liga, Copa Argentina y Supercopa.
También se aferra a lo que sucedió el año pasado. River llegó con dudas al debut en la Copa Libertadores. Venía de un pobre 0-0 contra Unión de local y un mes antes había perdido 03 con Lanús la Supercopa. Pero la lluviosa noche del 15 de marzo en Me-
dellín, ante el DIM, hubo un click. Con algunos retoques en el esquema, el equipo apareció. Ganó 3-1 en una gran producción. Y esa victoria trajo más victorias y se encadenó una seguidilla entre ambos torneos.
Ahora es distinto, porque está inmerso en una crisis. Es cierto. Tanto como que la noche de Lanús perdió la confianza. Y son conscientes de ello. Por eso, la primera apuesta es recuperarla. Empezar a dar pasos seguros. Enfrente tendrá a un rival duro como Flamengo, que también va por la Copa. ¿Podrá recuperarse? ■