Con la cabeza en la Champions, Real Madrid se despide de la Liga
El Real Madrid de la Liga en poco o en casi nada se parece al que compite como un león indomable en Europa. Cada tanto, le aparece una piedra en el camino. Un suerte del River de Gallardo, tan competitivo internacionalmente tan lejano en el ámbito local. Esta vez, en su visita al Espanyol, cayó en un partido parejo. Al cabo, fue 1-0 para los periquitos. Ahora, con un partido más disputado, el Real Madrid se ubica tercero, a 15 puntos del cómodo líder invicto, Barcelona.
No tuvo juego, es cierto. Pero tampoco suerte. De hecho, el gol del equipo local llegó en tiempo de descuento. Lo convirtió Gerard Moreno, con un remate de derecha, tras un centro de Sergio García.
Zinedine Zidane contó una verdad al cabo del partido: “El resultado no tuvo que ver con lo sucedido en la cancha. No merecíamos perder”.
El entrenador francés tomó una decisión que retrata sus prioridades: le dio descanso a Cristiano Ronaldo, su figura, Balón de Oro y Premio The Best de 2017. Está claro: piensa en la Champions League.
En consecuencia de su ausencia el galés Gareth Bale fue su principal referencia en el ataque. Sobre todo, hasta el ingreso de Karim Benzema por Isco cuando al partido le quedaban 22 minutos.
Quedó claro en el primer tiempo: el Real Madrid fue más y llegó más. Las situaciones más claras estuvieron en los pies y en la cabeza de Bale. Pero no. Entonces apareció el arquero local Diego López.
En el segundo tiempo, las cosas cambiaron: los catalanes se animaron, emparejaron el desarrollo y complicaron más. Desde el lugar de los hechos, cuenta sobre ese tramo delpartido el comentario de la agencia AFP: “En el 56, Gerard Moreno empalmó un disparo cruzado que Keylor Navas logró enviar a córner y a falta de un cuarto de hora para el final, Moreno volvió a poner a prueba con un remate de cabeza al meta del Real Madrid (78). Los blancos apenas inquietaron la portería de Diego López en la segunda mitad salvo por un disparo lejano de Mateo Kovacic (60) sin mayores consecuencias”.
El cero compartido parecía una certeza que no incomodaba mucho a ninguno. Pero no. Apareció ese centro, ese gol y el final de una racha decorosa del Real Madrid: llevaba cinco victorias consecutivas .
Dejó un mensaje el partido: el Real Madrid sólo piensa en el partido del 6/3 frente al París Saint Germain, en el Parque de los Príncipes, por la vuelta de los octavos de final de la Champions. La ida fue un 3-1 para el Real. La vuelta promete ser una película de suspenso... ■