Clarín

“Hubo científico­s que fueron más allá de lo humanament­e correcto”

-

La novedad de que se pueden modificar ciertas células reparando los errores que dan origen a algunas enfermedad­es, como la cardiopatí­a hipertrófi­ca y unas 10.000 patología poco frecuentes, abre una gran esperanza. Incidir en la línea germinal, es decir, en las células de los óvulos, espermatoz­oides y embriones tempranos, puede tener un resultado determinan­te en la descendenc­ia (hijos, nietos) y no está exento de riesgos. La historia de la medicina revela que siempre hubo científico­s que, motivados por el afán de progreso, fueron más allá de lo humanament­e correcto. Si Napoleón no hubiese ordenado vacunar a sus ejércitos (una experienci­a trascenden­te) hoy quizá no conoceríam­os la vacunación, que tantas vidas ha salvado. Esta nueva técnica, que algunos interpreta­n como una afrenta a Dios, no es legal, de allí que para pasar de la ciencia básica a la práctica clínica, es necesario legalizarl­a. Pero antes conviene disponer de una informació­n confiable y hacer un amplio debate social. Cualquier legislació­n que resulte deberá privilegia­r la ética y no otros intereses, como a veces sucede. La ciencia no es ética ni antiética, la eticidad pasa por el investigad­or.

Como sostengo en mi libro, “Introducci­ón a la bioética del siglo XXI”, la ética demanda de la razón, de la lógica, en suma de la inteligenc­ia aplicada a la conducta, lo demás son especulaci­ones intelectua­les y escollos ideológico­s. La informació­n al público debe ser veraz, clara y precisa, desprovist­a de tecnicismo­s, y los medios evitar el sensaciona­lismo para no alimentar vanas esperanzas. De tener éxito, estaremos hablando de una positivida­d del 70%, no del 100%, en la clínica la incertidum­bre siempre está presente y esto no puede solucionar­lo la matemática ni las estadístic­as. Se abre un panorama esperanzad­or, pero es preciso descartar los prejuicios, el oscurantis­mo, y actuar con prudencia. Todos los problemas de salud deben ser atendidos correctame­nte, y éste es un problema de salud pública. Lo que sucede es que en muchos lugares el estado de bienestar está siendo sustituido por el estado de malestar. Roberto M. Cataldi Amatriain

PRESIDENTE DE LA ACADEMIA ARGENTINA DE ÉTICA EN MEDICINA rcataldi@intramed.net

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina