China anuncia un nuevo aumento en su presupuesto para los militares
Lo informó ayer al abrir las sesiones de la Asamblea Popular. Será de 8,1%, superior al alza de su economía.
China apuntará a las fuerzas armadas con más acciones, como la “modernización significativa” de equipamiento, una mayor integración entre civiles y militares y el aumento del 8,1% del presupuesto para el sector, pese a que su economía crecerá este año alrededor de un 6,5 por ciento, por debajo de 2017. Estos fueron los anuncios más importantes realizados ayer por el primer ministro Li Keqiang durante la primera sesión de la Asamblea Nacional del Pueblo en Beijing.
El premier Li Keqiang, al abrir la 13° sesión plenaria de ese cuerpo colegiado (una suerte de Parlamento) justificó el aumento en un escenario global marcado por “profundos cambios en las condiciones nacionales sobre la seguridad”.
“Debemos sostener con decisión la posición de guía del presidente Xi Jinping sobre el refuerzo de las fuerzas armadas mientras desarrollamos el sistema nacional de defensa y las fuerzas armadas mismas”, dijo Li.
El anuncio del aumento del presupuesto en defensa fue el más importante en la primera jornada de la Asamblea, que este año durará 16 días -más de lo que es habitual- y que se centrará además en una polémica reforma de la Constitución china que allanaría el camino a una presiden- cia ilimitada del presidente Xi Jingping. El mandatario, que ya concentra las jefaturas del Estado, de las fuerzas armadas y del Partido Comunista, se convertirá así en el líder chino con mayor poder desde las épocas de Mao Zedong. Los críticos advierten de los peligros de un mandato vitalicio de Xi, que también podría aspirar a una política más contundente en política exterior.
En 2015, al anunciar los cambios que se venían en el sector militar del país, Xi había anunciado la reducción de las tropas, de 2,3 a 2 millones de militares, y la provisión de las dotaciones obsoletas a favor de la tecnología apuntando a hacer de las fuerzas armadas “una fuerza de clase mundial” para mediados del siglo.
El presupuesto 2018 anunciado ayer, en tanto, aumenta un 8,1%, hasta los 175 mil millones de dólares. Las líneas sobre los planes militares están destinados a alimentar tensiones en la zona, en particular por las disputas en el mar de la China del Sur, incluyendo los proyectos de los portaaviones a propulsión nuclear antes de 2030, los súper caza y los misiles balísticos intercontinentales
“Seguiremos reformando la defensa nacional y las fuerzas armadas, y construyendo una fuerte y sólida defensa para proteger nuestras fronteras terrestres, costeras y aéreas”, agregó el premier Li.
En su informe, el premier trazó los escenarios económicos comenzando por las previsiones de crecimiento para 2018 “en torno al 6,5%”. “La economía de China está en transición de una fase rápido crecimiento a un nivel de desarrollo de alta calidad”, reveló en sintonía con los escenarios y los objetivos ilustrados por Xi. El aumento del presupuesto militar es el mayor incremento en tres años. El presupuesto militar de China es el segundo más grande del mundo, después del estadounidense. El dinero destinado a esta cartera es el mayor porcentaje de los presupuestos generales del gigante asiático, y representa un 5,24 % del gasto total. El aumento presupuestario de Defensa de China ha sido siempre superior al crecimiento de la economía, aunque se ha moderado con respecto a la década pasada, en la que casi alcanzó el 20% en algunas áreas.
La decisión de China está en sintonía con las políticas de defensa ejecutadas por Estados Unidos y Rusia. El gobierno de Donald Trump anunció en febrero que la prioridad ya no sería la lucha contra el terrorismo, sino la “competencia entre grandes poderes”. Bajo este nuevo paradigma la Casa Blanca destinó un presupuesto de 716.000 millones de dólares para sus fuerzas armadas, lo que implica un aumento del 7% con respecto a 2017. Por su parte, Vladímir Putin anunció la semana pasada que Rusia tiene un nuevo arsenal de armas: misiles intercontinentales, cohetes ultrasónicos y armas con rayos láser para enfrentar al escudo antimisiles estadounidenses y al despliegue de la OTAN en el este de Europa. ■