Clarín

Aranceles al acero: el Gobierno reconoce una situación “complicada”

Lo dijo el secretario de Comercio argentino, que está en Washington y busca una excepción para el país.

- Paula Lugones plugones@clarin.com

El Gobierno reactiva las negociacio­nes en Washington para intentar que la administra­ción de Donald Trump retire a la Argentina de la “lista negra” que incluyó tarifas de 25% para el acero y 10% de aluminio para quienes exportan esos metales a Estados Unidos. “La situación es complicada”, reconoció el secretario de Comercio Miguel Braun, y agregó que buscarán convencer a las autoridade­s en esta ciudad de que la producción y el comercio de esos productos desde Argentina “no representa una amenaza para la seguridad nacional” estadounid­ense. Este martes se reunirá con el poderoso secretario de Comercio Wilbur Ross.

En una medida que encendió las alertas de una posible guerra comercial global, Trump firmó el jueves pasado una orden que impone una tarifa del 25% al acero y otra del 10% al aluminio procedente­s del exterior. La medida, que entrará en vigor en 15 días, fue decidida porque – según Trump– la sobreofert­a de ese produc- to en Estados Unidos amenaza la seguridad nacional porque esos dos metales son clave para infraestru­ctura de defensa. Pero tendrá serias consecuenc­ias sobre muchos otros estados, varios de ellos en Europa, que amenazaron con represalia­s a productos estadounid­enses.

Trump dejó afuera de esta decisión a las exportacio­nes de Canadá y Méxi-

co, dos importante­s proveedore­s con los que negocia la renovación del NAFTA, y abrió la puerta a reducir o elevar los aranceles de manera individual a ciertos países. Es por eso que el presidente Mauricio Macri se comunicó rápidament­e el viernes con Trump y le pidió que Argentina quedara exceptuada de esa medida porque son países aliados y no represen-

ta una amenaza para EE.UU. Nuestro país exporta por unos 770 millones de dólares y las empresas más afectadas serían Techint y Aluar.

Braun es el primer funcionari­o que llega aquí a tratar directamen­te el asunto. Si bien su presencia aquí estaba pactada hace tiempo –se presentó en un foro en el Centro de Estudios Estratégic­os e Internacio­nales– se vio con funcionari­os del consejo Económico de la Casa Blanca y del US Trade Representa­tive (USTR).

Este martes tendrá un encuentro clave con el secretario de Comercio Wilbur Ross, el hombre que alienta la posición proteccion­ista del gobierno de Trump y autor del informe que le recomendó al presidente varias opciones para imponer tarifas al acero y aluminio; y también con el jefe de Gabinete del USTR, Jamieson Greer.

En un diálogo con correspons­ales argentinos en esta ciudad en la embajada argentina, Braun señaló que no cree que en estos días EE.UU. tome una resolución sobre posibles excepcione­s, pero que había venido “para entender a fondo cómo va a ser la toma de ese proceso”, que debe finalizar en unos 15 días desde que se anunció, y en función de eso definir una estrategia.

Argentina exporta acero y aluminio a Estados Unidos por unos 770 millones de dólares.

“La producción y el comercio argentino de acero y aluminio no representa una amenaza a la seguridad nacional de EE.UU.”, dijo y destacó que nuestro país coopera con el Foro Mundial del Acero del G-20. El embajador Fernando Oris de Roa agregó que en cuestiones de seguridad hay también una buena relación y destacó “el compromiso que la Argentina tiene del Comando Sur”, que fue visitado hace pocas semanas por la ministra de Seguridad Patricia Bullrich.

Las exportacio­nes argentinas representa­n sólo 0,6% del acero y 2,3% del aluminio de todas las importacio­nes que hace Estados Unidos en ambos rubros y, por lo tanto, para el Gobierno, Argentina no es causante ni contribuye a las distorsion­es que afectan a los mercados. ■

 ??  ?? Juntos. El embajador Oris de Roa y el secretario Miguel Braun, en la sede diplomátic­a en Washington.
Juntos. El embajador Oris de Roa y el secretario Miguel Braun, en la sede diplomátic­a en Washington.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina