Salud: habrá más seguridad en las guardias para combatir la violencia
Es en 58 centros de salud. Profundizarán, además, el sistema que da prioridad de atención a los casos más graves.
La atención en los hospitales públicos de la Provincia de Buenos Aires siempre fue caótica: largas esperas, falta de insumos, problemas edilicios y, en especial, episodios de violencia e inseguridad. Esto causó que el sistema de salud estatal de la región más grande y poblada del país se hundiera en el abandono.
Hay varios estudios que dan una idea de la situación que se vivía, y que aún se vive. La ONG Defendamos Buenos Aires contabilizó en 2017 los ataques a médicos y enfermeros en las guardias y reveló que aumentaron un 17% si se compara el promedio de agresiones mensuales de 2016.
Según los datos, entre enero y junio de ese año hubo 34 ataques mensuales. Mientras que en 2016, los casos eran 29 por mes.
También era muy crítico el estado de la mayoría de las guardias de los hospitales. Un relevamiento del Ministerio de Salud provincial, de 2016, dejaba en evidencia lo que era una realidad para el 40% de los bonaerenses que acuden al sistema de salud: el 75% de los centros de salud estaban en estado crítico y necesitaban obras, y dos directamente debían ser demolidos.
A los problemas de infraestructura se sumaba la falta de personal - oficialmente, en ese momento, se estimaba que se necesitaban 2.103 profesionales (553 médicos y 1.550 enfermeros)-, solo para recuperar las 636 camas que se habían perdido por falta de inversión.
Con el objetivo de comenzar a recomponer la situación, el Gobierno bonaerense lanzó en 2016 el Plan Integral de Guardias, que tuvo como
eje reforzar y mejorar el funcionamiento de las 58 guardias de hospitales provinciales. Al día de hoy, según datos de la Provincia, ya se refaccionaron guardias en 30 hospitales y esperan para 2019 terminar de mejorar 28 guardias más.
“Las guardias son el corazón de los hospitales, el lugar por donde más gente circula y donde se atienden casos de urgencia. Nuestro objetivo es que vuelvan a ser un lugar de los bonaerenses”, dijo la gobernadora María Eugenia Vidal.
Para ello, según la jefa de Estado Provincial, “estamos realizando obras, adquiriendo nuevo mobiliario, dotando a las guardias de equipamientos y conectividad, y mejorando la seguridad”.
En relación a este último punto, la Provincia de Buenos Aires planea instalar centrales de monitoreo y señalética en las guardias y también mejorar y reforzar la presencia de policías en aquellos hospitales de zonas más críticas.
Con respecto a la atención, se profundizará la implementación del Sistema Triage, que privilegia el nivel de urgencia del paciente y reemplaza la vieja costumbre de la atención por orden de llegada.
“En la actualidad, las guardias de los hospitales reciben pacientes con patologías muy diversas, Algunas de estas dolencias (como gripe y anginas) podrían resolverse de formas apropiadas fuera del hospital, por ejemplo, en un Centro de Atención Primaria de Salud cercanos a su casa”, contó Andrés Scarsi, ministro de Salud provincial.
Este sistema ordena el flujo de pacientes por medio de una mesa de entrada que analiza cada caso y luego los deriva de acuerdo al grado y tipo de urgencia.
Dentro del plan también se contempla, según dijeron desde el Ministerio provincial, ampliar la cobertura del SAME a más distritos, integrar a 800 médicos para mejorar la calidad de la atención y además realizar obras en los 58 hospitales, de los cuales 22 corresponden a interzonales, como el Gandulfo de Lomas de Zamora, el San martín de La Plata, el Evita de Lanús, el Penna de Bahía Blanca, entre otros. ■