Londres compara a Putin con Hitler, y el Mundial, con los Olímpicos de 1936
El canciller británico dijo que el líder ruso busca publicitarse con el mundial como hizo el dictador alemán.
La tensión y las sospechas mutuas continúan entre Rusia y Gran Bretaña. El embajador británico Laurie Bristow en Moscú rechazó asistir al Kremlin el miércoles a “una explicación” del envenenamiento del doble agente. Allí Moscú argumentó que “era una puesta en escena” o un “ataque terrorista”. En su reemplazo estuvo otro diplomático mientras el canciller inglés Boris Johnson era interpelado sobre el ataque y su política con Rusia en el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de los Comunes. Allí Boris ratificó que el “intento de envenenamiento del doble agente Skripal y su hija Yulia era un mensaje ruso a potenciales desertores rusos en el reino.
Un vocero británico dijo que el embajador Bristow no participaría, pero sería representado por “un funcionario a nivel operacional”.
El embajador británico en Moscú evitó escuchar los argumentos del Kremlin.“O las autoridades británicas no estuvieron a la altura de gene- rar una protección contra este tipo, digamos así, de ataque terrorista. O ellos directa o indirectamente, yo no acuso a la persona que sea, pusieron una puesta en escena contra un ciudadano ruso”, declaró Vladimir Ermakov, un alto responsable del Kremlin.
Cuando un diplomático británico que asistió a la reunión le preguntó sobre su programa de armas químicas rusas, Ermakov lo acusó de “rusofobia”. ”Salga un poco de su rusofobia, de su mentalidad insular. Yo siento vergüenza de ustedes” respondió.
En el Comité de Relaciones Exteriores, el canciller británico dijo que Rusia deliberadamente atacó a Gran Bretaña de una manera que impide lanzar el artículo V de la OTAN, que establece que un ataque a un país miembro es un ataque a todos. Los intentos de asesinato están por debajo de ese artículo. Esa es una de las razones por las que el reino tiene dificultades para pasar más allá de una condena retórica de la UE y la OTAN, que serán analizadas en la inminente reunión en Bruselas.
Para Johnson el presidente Vladimir Putin utilizará el mundial de fútbol en Rusia como Adolf Hitler usó los Juegos Olímpicos en 1936 como propaganda. “Toda la evidencia nos lleva inexorablemente al Kremlin” dijo el canciller al inicio de la interpelación. Insistió que, “tal como lo dijo el diputado conservador Ken Clarke, los rusos utilizaron gas nervioso para dejar su firma y mandar un mensaje poderoso a potenciales desertores”.
Johnson, que es periodista , insistió que “Rusia ha respondido con negación, distorsión y retraso” a cada uno de las pedidos británicos. Desde la extradición de los presuntos asesinos de Alexander Litvinenko a los requerimientos actuales de una explicación en el uso del gas nervioso contra el doble agente.
Cuando los legisladores le preguntaron por qué los rusos habían elegido a Gran Bretaña, Johnson respondió que “eligieron a Gran Bretaña porque es un país que cree en la libertad, la democracia y el imperio de la ley y ha llamado la atención a Rusia sobre el abuso de esos valores”.
El canciller británico rechazó la acusación que Gran Bretaña no quiso antagonizar a Moscú porque su economía en la City depende del dinero ruso de origen oscuro.Pero insistió que el enfrentamiento es con el gobierno y no con el pueblo ruso,que recibió muy mal la clausura del British Council por parte del Kremlin, en este guerra de represalias mutuas del intento de asesinato de Skripil y las respectivas expulsiones de 23 diplomáticos y espías.
La interpelación a Boris Johnson continúa con el Brexit. ■