Río Turbio: ahora la Oficina Anticorrupción pidió apartar al juez Rodríguez
El organismo que dirige Laura Alonso lo hizo porque el magistrado separó al fiscal Carlos Stornelli de la causa.
La guerra de intrigas y ansiedades que crecen como hongos respecto de las versiones sobre una supuesta excarcelación de Julio De Vido acaba de sumar otro capítulo ayer: la Oficina Anticorrupción (OA) –querellante en la causa- solicitó al juez Luis Rodríguez que se aparte del caso. En esta causa se investiga el millonario desvío de fondos para obras que debían realizarse en el Yacimiento Carbonífero Río Turbio.
El pedido del organismo que dirige Laura Alonso a su vez responde a otro apartamiento: el del fiscal Carlos Stornelli, que había sido pedido por la defensa de De Vido y admitido por Rodríguez la semana pasada. “La decisión adoptada por su señoría, por infundada y arbitraria, provoca un perjuicio de imposible reparación ulterior, en tanto implica el apartamiento del representante del Ministerio Público Fiscal que desde un inicio intervino legal y diligentemente en el proceso”, se sostiene en la presentación de la OA. “Lo que lleva a preguntarse a esta parte si el trasfondo de la decisión adoptada no obedece más una directa intención de “deshacerse” del Dr. Stornelli frente al permanente impulso que le ha dado al proceso”, agrega, yendo al corazón de las sospechas.
En la presentación, la Oficina Anticorrupción señaló además que “llama la atención no sólo el momento en que se ha realizado el planteo por parte de la defensa, sino también el cambio de criterio adoptado por su señoría luego de que en otras dos oportunidades anteriores decidió en sentido contrario sobre la misma cuestión”. Efectivamente, el ex ministro de Planificación Federal y los demás imputados ya habían tratado de apartar a Stornelli del caso varias veces, sin que el reclamo tuviera eco por parte de Rodríguez. Sin embargo, las tensiones entre el juez y el fiscal tampoco son nuevas en esta causa: quedaron expuestas, entre otras ocasiones, la primera vez que Stornelli pidió el desafuero de De Vido en la Cámara de Diputados, y Rodríguez rechazó tramitarlo. Sólo cuando la Cámara Federal le ordenó hacerlo, el juez firmó la orden que luego se votó en el recinto, quitándole al ex ministro los fueros que lo protegían. Para la OA, el juez Rodríguez “se limitó a transcribir primero y reescribir después los argumentos del defensor incidentista, incluso los notoriamente confusos que asimilaban el deber de objetividad con una pretendida imparcialidad, contraria a la naturaleza misma de quien es parte en proce- so”. En otras palabras: el imparcial y objetivo debe ser el juez, y no el fiscal que en cambio tiene la tarea de acusar a los sospechosos en nombre de toda la sociedad. “Ya desarrollados los motivos que tornan insostenible lo decidido, alertamos sobre la gravedad del incidente para la causa, no solo por la alteración del esquema constitucional y legal que estructura el debido proceso, sino porque además pone en evidencia pérdida de objetividad y crea en los acusadores, un razonable temor de parcialidad”, finaliza. La jugada de Alonso se suma a las francas sospechas que manifestó Carrió respecto a un supuesto plan para enganchar a De Vido en el tren de excarcelaciones que viene recorriendo la justicia federal. ■