La joya de Foster donde se instaló el Ejecutivo para darle brillo al sur porteño
La sede de Uspallata al 3100 vale US$ 60 millones. Para comprarla, venderán dos inmuebles.
Con su mudanza a Parque Patricios, el Gobierno porteño, entonces encabezado por Mauricio Macri quiso mostrar que apostaba fuerte a desarrollar la zona sur. Para reemplazar al edificio de Bolívar 1, su sede histórica, el Ejecutivo aprovechó otro igual de majestuoso pero mucho más moderno: el que diseñó el británico Norman Foster, inicialmente, para albergar la casa central del Banco Ciudad.
El Gobierno se instaló en el edificio de Uspallata al 3100 el 1° de abril de 2015. Pero aún no es dueño de su sede: se la alquila al Banco Ciudad. Por eso, a fines del año pasado la Legislatura autorizó la venta de dos inmuebles para financiar la compra del nuevo palacio gubernamental. Uno está en Esmeralda Nº 638/642 y el otro en Viamonte 860/888/900.
El edificio de Foster está tasado en unos US$ 60 millones. Para saldar la diferencia entre el valor de venta de los dos inmuebles y el de la nueva sede, el Gobierno porteño tomará un crédito UVA del propio Banco Ciudad.
A nivel tecnológico, la construcción de Foster supera ampliamente al viejo palacio de Bolívar 1. Se trata de un edificio sustentable, que reci- cla sus aguas servidas para reutilizarlas en los inodoros. Y almacena el agua de lluvia para regar los espacios verdes. Para la refrigeración, un sistema impulsa aire desde el piso, mientras circula agua fría por un radiador en el techo.
La iluminación es natural: el frente y contrafrente son vidriados y el techo, cubierto por un manto de hormigón ondulado, tiene lucarnas por las que pasa la luz del sol. La planta baja y los tres niveles superiores, en los que trabajan 1.200 personas, son abiertos y asoman a un atrio central. Hay pocos despachos cerrados, entre ellos los del jefe y vicejefe de Gobierno. Pero la sala de reuniones de Gabinete está en planta baja y puede ser vista desde la calle, porque es mente transparente.
Paulatinamente, el Ejecutivo fue mudando dependencias y ministerios a otros edificios del sur, como el de la ex fábrica Canale, rebautizado como "Palacio Lezama", en La Boca, o el Finocchietto, en Barracas. Y al mismo tiempo desactivó otras de sus sedes tradicionales del centro, como el Edificio del Plata, en Carlos Pellegrini y Perón, que hace dos años fue vendido a IRSA en US$ 68 millones. ■