Reforma judicial de Vidal: nueva escuela, más exámenes y traslados de jueces
Con datos de una aplicación web, la Provincia busca modificar el funcionamiento de los tribunales.
El diagnóstico sobre los pobres resultados que la justicia ofrece a los argentinos sigue acumulando promesas de tratamiento. Pero frente a las idas, vueltas y recálculos que la Corte y el Gobierno nacional vienen amasando para paliar la crisis de los tribunales federales y penales -para empezar-, la provincia de Buenos Aires se trazó un plan ambicioso con el que espera dar vuelta el partido.
Los cambios que el gobierno de María Eugenia Vidal espera aprobar durante este año en la Legislatura contemplan la creación de una escuela judicial obligatoria para magistrados y fiscales, un examen habilitante para que los abogados puedan litigar y plazos progresivos para que puedan presentarse ante las cámaras de apelación y la Corte, y un sistema de traslados de jueces por zonas en las que se dividirá la provincia, según las necesidades que revela un flamante "mapa judicial" que será actualizado online.
La hoja de ruta de la reforma permanece en un powerpoint que el ministro de Justicia, Gustavo Ferrari, pondrá a consideración de la gobernadora. Planteado por etapas y con distintos ejes, el objetivo es garantizar la participación de la víctima durante el proceso judicial y agilizar los procesos penales, cuyos recursos procesales hoy permiten hasta siete apelaciones y hábeas corpus. Por ejemplo, las víctimas de delitos podrán conocer y participar de los expedientes. Si los magistrados no hicieran esa consulta, sus decisiones serán nulas.
"Todo el plan responde a una pregunta: ¿la Justicia es un servicio? Para nosotros sí. Entonces haremos los cambios necesarios para que ese servicio sea eficiente", sintetiza Ferrari ante Clarín. Otra de las metas finales del proceso, según el funcionario, es la de despolitizar los tribunales.
"Hay que poner término a los plazos procesales, simplificar los trámites y hasta el lenguaje de los escritos”, agrega el funcionario.
El nuevo Código Procesal Civil y Comercial craneado por la Provincia y que será presentado en octubre busca "oralizar" la mayor parte del proceso, para resolver más cuestiones en plazos más cortos y "mejorar el contacto con el juez". El nuevo Código Contravencional multiplicará las opciones de probation, trabajos comunitarios o reparaciones del daño. Si se cumple los plazos, la Legislatura lo recibirá en junio.
También se buscará sancionar una nueva ley de Procedimiento Laboral, para reducir los litigios -en 2016 se iniciaron casi 66.000 causas- y acortar su duración, que ahora oscila entre uno y tres años. Aquí llega la primera innovación fuerte: el plan es desdoblar los tribunales, y que cada uno de sus tres jueces resuelva solo el lote de casos que le toque. El proyecto verá la luz en julio.
El mapa judicial es la llave con la que se buscará destrabar la resistencia de muchos magistrados, legisladores y también intendentes, que detrás de escena son actores clave en de la gestión judicial actual, por su enorme influencia en la selección de los jueces. A través de una aplicación web que ya está casi terminada, el mapa tendrá actualizado online los números de todos los juzgados, tribunales y las causas que manejan. El plato fuerte de la reforma será en diciembre, cuando tras nueve meses de trabajo en una comisión, los legisladores provinciales comenzarán a tratar la Ley Orgánica del Poder Judicial, cuya meta es "reorganizar la estructura del Poder Judicial para tener dependencias donde realmente se necesitan". El mapa judicial certifica la afirmación: mientras en algunos juzgados ingresan 48 causas por semana, en otros menos de dos.
La última parte de la reforma implica cambiar la ley de enjuiciamiento de Magistrados, para acortar los plazos de los jurys y aceitar el proceso legalizando que cuando un presidente de la Corte inicia un juicio político a un juez o fiscal, debe terminarlo antes de dejar su silla, lo que ocurre todos los años.
A su vez, desde que la ley se sancione para ser juez habrá que cursar una Escuela Judicial obligatoria, de entre un año y medio y dos de duración. Con esos exámenes -filmados para evitar suspicacias- se conformarán ternas por orden de mérito. El año que viene la lupa se posará también sobre los abogados, que tendrán que cursar una capacitación obligatoria antes de recibir la habilitación con la matrícula. Pese a las protestas de las universidades, el cuadrito con el título no será suficiente para ejercer la abogacía en la Provincia. ■