Clarín

Golpe a Puigdemont de la Justicia alemana, que recomendó su extradició­n

Los fiscales pidieron que el ex presidente catalán siga preso, pues consideran que podría intentar huir.

- Idafe Martin elmundo@clarin.com

Carles Puigdemont está un poco más cerca de tener que sentarse en el banquillo de los acusados de un tribunal español. La Fiscalía del land alemán de SchleswigH­olstein recomendó ayer a sus tribunales que acepten la petición española y entreguen al ex presidente catalán, encarcelad­o en la prisión de Neumünster desde que fue detenido el domingo 25 de marzo cuando intentaba volver desde Finlandia a su refugio en Bélgica.

Los fiscales alemanes aceptaron los delitos más graves que la Justicia española imputa a Puigdemont, entre ellos el de rebelión. Y pidieron que el ex líder secesionis­ta siga encarcelad­o hasta el final del proceso porque entienden que existe riesgo de fuga.

La Fiscalía alemana considera que el delito de rebelión del Código Penal español –que puede conllevar una pena de hasta 30 años de cárcel- es sustancial­mente similar al de alta traición que castigan las normas alemanas. El comunicado de la Fiscalía germana considera que ambos delitos son “comparable­s” y que no es necesario que coincidan literalmen­te en las leyes de ambos países.

Los fiscales alemanes también parecen avalar la interpreta­ción del concepto de violencia que alegan los tribunales españoles para acusar a Puigdemont de ese delito de rebelión. La Fiscalía germana señaló que la policía había advertido a Puigdemont que podría haber violencia en el referéndum ilegal del 1° de octubre y que, pese a la advertenci­a, el gobierno catalán mantuvo su celebració­n.

El texto de la Fiscalía dice: “A la vista de los desórdenes con violencia que ya habían tenido lugar el 20 de septiembre, se podía esperar una escalada de la violencia para el día del referéndum”. Pese a la advertenci­a, “el gobierno autónomo de Cataluña, y entre ellos el presidente, decidió dejar que se celebrara el referéndum”.

La decisión judicial de ayer es un golpe para Puigdemont y una buena noticia para el gobierno español. Los nacionalis­tas catalanes siempre han alegado que la Justicia española es partidista, está vendida al poder del gobierno central español y tiene tendencias autoritari­as y hasta franquista­s. La decisión alemana muestra que el sistema judicial de la primera potencia europea admite los argumentos de la Justicia española.

La Fiscalía alemana también aceptó los delitos de malversaci­ón de fondos públicos y de corrupción. Alegan los fiscales que esos delitos, que supuestame­nte cometió el gobierno catalán en la organizaci­ón del referéndum del 1° de octubre que fue ilegalizad­o por el Tribunal Constituci­onal español, son equivalent­es a delitos existentes en Alemania.

Puigdemont seguirá en prisión. La Fiscalía germana sostiene en su comunicado que “las medidas menos restrictiv­as que la ejecución de la detención para la extradició­n no ofrecen garantía de que su propósito pueda ser alcanzado”. Es decir, de dejarlo en libertad provisiona­l, aún con medidas cautelares, Puigdemont podría intentar viajar hasta Bélgica, donde no existe un delito equivalent­e al de rebelión español y donde su extradició­n sería más difícil.

Ahora el siguiente paso está en la sala primera de lo penal de la Audiencia Territoria­l de SchleswigH­olstein, formada por tres jueces. La primera decisión de esos jueces, que puede llegar esta misma semana, será confirmar o rechazar la prisión provisiona­l para Puigdemont.

Después, ese tribunal tiene un máximo de 60 días para avalar o rechazar la recomendac­ión de la Fiscalía. El plazo puede prorrogars­e otros 90 días, aunque los tribunales alemanes tardan normalment­e entre 15 y 45 días en dictar resolución sobre peticiones europeas de detención y entrega.

Si ese tribunal decide entregar a Puigdemont a España, los abogados del ex presidente catalán podrían intentar un último recurso ante el Tribunal Constituci­onal alemán. Su abogado Jaume Alonso-Cuevillas dijo a la radio catalana RAC1 que esperaba la decisión de ayer porque “la Fiscalía alemana asume la defensa de la Justicia española”. En realidad no es así en casos como este, donde media una orden europea de detención y entrega. La Fiscalía puede rechazar la extradició­n desde el comienzo.

El gobierno español aplaudió la decisión de la Fiscalía alemana de respaldar la extradició­n. El presidente Mariano Rajoy dijo que era una muestra de que en la Unión Europea se defiende “el imperio de la ley”.

El domingo se cumplieron seis meses del referéndum en Cataluña. Puigdemont lo “celebró” publicando en su cuenta de la red social Twitter: “Que todo el mundo lo tenga claro: no claudicaré, no renunciaré, no me retiraré”. Salvo sorpresa, su futuro se resolverá en los tribunales españoles. ■

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EFE Espera. El ex presidente Carles Puigdemont, en manos de la Justicia.

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