Chile: incendian 16 vehículos, en otro ataque atribuido al extremismo mapuche
Fue en el sur del país, en La Araucanía. Son 4 excavadoras y doce camiones. Acusan a un grupo radicalizado.
Encapuchados incendiaron durante la madrugada de ayer doce camiones y cuatro máquinas excavadoras en la sureña región chilena de La Araucanía, 700 kilómetros al sur de Santiago, según informaron fuentes de Carabineros y las autoridades políticas de la zona.
El ataque ocurrió pasadas la una de la mañana hora local en un terreno de la empresa Áridos Mardones, que presta servicio a la Forestal Mininco, situado en las cercanías de Temuco, la capital regional, y fue perpetrado por al menos una decena de sujetos encapuchados, según dijo a la policía el vigilante del lugar.
Poco antes del ataque, la policía había realizado una ronda preventiva por la empresa, donde los bomberos trabajaron después más de dos horas para extinguir las llamas.
Hasta el lugar llegó después el intendente (gobernador) de La Araucanía, Luis Mayol, quien consideró “un acto terrorista” el incidente.
“Efectivamente esto es un acto terrorista, es un incendio terrorista y no hay otra conclusión que sacar, esto no es un delito común (...) es realmente un hecho premeditado, estudiado, intimidaron al cuidador, dispararon y quemaron 16 maquinarias de la empresa del señor Mardones”, precisó en declaraciones a radio Cooperativa.
Los atacantes dejaron en el lugar un panfleto firmado por la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), una organización mapuche radical, con una leyenda alusiva al machi (chamán) Celestino Córdova, condenado a 18 años de prisión por el homicidio de un matrimonio de agricultores.
Córdova mantiene una prolongada huelga de hambre en demanda de un permiso para ir a renovar su “rewe”, un rito que anualmente deben cumplir las autoridades religiosas mapuches.
En la región se arrastra desde hace varias décadas un conflicto entre comunidades mapuches que deman- dan la devolución de tierras ancestrales y empresas agrícolas o forestales, que en los últimos años ha derivado en brotes de violencia en los que han muerto varios comuneros, policías y agricultores.
Al mismo tiempo, varias decenas de mapuches han sido procesados y condenados por diversos delitos, principalmente ataques incendiarios.
El atentado de este lunes ocurrió luego que el pasado sábado un tribunal oral de Temuco declarara culpables a dos comuneros y absolviera a otros dos, acusados del incendio intencional de una iglesia evangélica perpetrado en pleno culto en las cercanías de Temuco, el año 2016.
Como en otros casos, la Fiscalía invocó la aplicación de la ley antiterrorista a los mapuches, lo que fue descartado por falta de pruebas por el tri- bunal, que sin embargo declaró culpables de incendio premeditado a los hermanos Pablo y Benito Trangol y absolvió a Alfredo Tralcal y Ariel Trangol. La sentencia contra los hermanos Trangol se dará a conocer el próximo 27 de abril.
Otro ataque similar ocurrió en marzo pasado y dejó heridas a un camionero y daños a dos camiones en la región chilena de La Araucanía, donde se hallaron panfletos alusivos al mapuche Celestino Córdova, condenado por el crimen del matrimonio Luschinger Mackay, informaron fuentes judiciales.
El 22 de marzo, cuatro encapuchados atacaron a los dos camiones en la ruta que une las localidades de Victoria y Curacautín, 650 kilómetros al sur de Santiago, detalló el fiscal Enrique Vásquez.
“Se disparó en contra de un camión que transitaba por esta ruta, ese camión resultó con daños por disparos de perdigones en el frente del vehículo y el conductor se encuentra sin lesiones”, explicó entonces el fiscal.
Vásquez indicó que uno de los camiones recibió disparos de armas de fuego antes de ser incendiado.
En tanto, el conductor del vehículo fue internado en el Hospital de Curacautín, herido por el impacto de perdigones en su cabeza, aunque fuera de peligro.
El fiscal informó que en el lugar se encontró “un panfleto que hace alusión a Celestino Córdova, a la situación en que se encuentra”.
El mapuche Celestino Córdova es el único condenado por el crimen del matrimonio Luschinger Mackay, quienes en enero de 2013 murieron luego de que un grupo de desconocidos incendiaran su casa. ■