La lesión de Barrios le da otra chance a su compatriota Pérez

Los colombianos Sebastián Pérez y Wilmar Barrios llegaron a Boca para la temporada 2016/17. De estilos diferentes, el de más chapa era Pérez: venía de salir campeón de América con Atlético Nacional.

Pérez tuvo más minutos que su compatriota en el segundo semestre de 2016. Parecía empezar a acomodarse al Mundo Boca en los primeros meses de 2017 cuando sufrió una rotura de ligamentos que lo sacó de las canchas por el resto del año.

Barrios estaba relegado en la consideración del cuerpo técnico xeneize, pero la convocatoria de Rodrigo Bentancur al Mundial Sub 20, donde Uruguay llegó hasta las semifinales, le abrió una puerta. Wilmar entró, fue titular en los últimos seis partidos del torneo (cuatro victorias, dos empates) y se ganó no sólo la confianza del entrenador sino de los hinchas. Después de la lesión de Darío Benedetto, el goleador que se extraña desde fines de noviembre, Barrios pasó a ser de los más ovacionados durante el anuncio de las alineaciones.

Wilmar afrontó un 2018 bastante agitado. Además de la denuncia por presunta violencia de género en la que él y Edwin Cardona se vieron involucrados, tuvo que bancar la doble competencia de Boca y, de yapa, los compromisos de la fecha FIFA con su seleccionado. Tanto esfuerzo le pasó factura el domingo en Avellaneda.

Sin él, Guillermo Barros Schelotto maneja dos opciones para el decisivo encuentro con Newell’s en la Bombonera: ubicar a Sebastián Pérez (lo verá en la práctica de mañana) o correr a Leonardo Jara, quien ya se ha desempeñado en esa posición. Hay una tercera alternativa que el DT considera arriesgada: Fernando Gago. El ex volante de Real Madrid hizo fútbol ayer, a la par del resto. Se lo notó bien, con una lógica falta de ritmo. Estará para el cierre del torneo y, tal vez, los dos juegos finales del grupo copero. ■