El PJ anti K apura una cumbre: lejos de Cristina y con más críticas a Macri
Será en Córdoba y los recibirá el gobernador. Perfil más crítico y rechazo a una PASO que incluya a Cristina.
El peronismo anti K moverá una pieza. Luego del desteñido encuentro de Gualeguaychú, modesto en convocatoria y con postales grises, el clan que reúne a senadores y diputados del PJ Federal diagramó otro show.
Para evitar tropiezos, la cita será en Córdoba y el anfitrión será Juan Schiaretti: antiguo antagonista de los Kirchner, recibirá a los visitantes y bendecirá al espacio que potenciará su perfil opositor pero fija como límite electoral a Cristina de Kirchner.
Schiaretti hará el ritual de la bienvenida aunque, según lo convenido, la juntada solo será de senadores, di- putados y dirigentes. "Con esos encuentros vamos definiendo nuestra identidad", le dijo el senador Carlos Caserio a Clarín y redondeó: "Aspiramos a que, en unos meses, podamos compartir una reunión con la mayoría de los gobernadores".
El senador integra la mesa chica del Bloque Justicialista que preside Miguel Angel Pichetto y es el garante que ofrece un marco potente. La lista de asistentes está en proceso pero esperan a dirigentes ligados a Sergio Massa y a Florencio Randazzo.
Arrancará el jueves 26 y terminará el viernes: habrá juntadas con la JP, la JUP, empresarios y gremios. Toda la agenda, salvo el encuentro con Schiaretti, será en el Sheraton de Córdoba. Azares: la juntada peronista coincidirá con la largada del Rally Mundial.
El senador Caserio, que además preside el PJ cordobés -la marca electoral es Unión por Córdoba (UPC)-, prometió un auditorio con asistencia perfecta de intendentes, legisladores y funcionarios. Unas 500 per- sonas.
En esa juntada, según la hoja de ruta previa, habrá lo que no hubo en Gualeguaychú: ronda con el jefe territorial y volumen para ratificar la tesis de que en la presidencial no contemplan una PASO que incluya al kirchnerismo.
El protocolo no escrito de esos cumbristas es mirar solo lo nacional y liberar a cada gobernador a hacer "lo que tenga que hacer" para ganar en sus provincias.
Habrá un tono opositor más intenso contra Macri: quejas por tarifas, como se vio en Congreso, y algún reproche por el accionar judicial con el PJ y Eduardo Fellner. Y fuego sobre Luis Caputo, a quien quieren volver a interpelar.
El mandatario cordobés es uno de los diez gobernadores del peronismo que apuestan a su reelección el año que viene, acumula millaje anti K y ostenta una relación directa con Mauricio Macri. Schiaretti se recuesta sobre otro factor: en Córdoba, Cambiemos se reparte en varias tribus y sin primarias para resolver candidaturas, deberán someterse al "dedazo" presidencial.
La pulsión por dejar atrás el episodio litoraleño produjo un cortocircuito. Mientras Caserio armaba la reunión cordobesa, el diputado Pablo Yedlin armó un encuentro en Tucumán al que iría Juan Manzur. En el apuro, cordobeses y tucumanos fijaron mismo día para sus cumbres. Al final se pusieron de acuerdo, y Tucumán quedó como próximo destino. ■