Un tiempo para jugar, otro para sufrir
Los de Berti siguen en zona de clasificación a la Sudamericana. Los visitantes reclamaron mucho por un penal.
Después de dominar en el primer tiempo y de sufrir en la segunda parte, Argentinos se quedó con una victoria por la mínima diferencia ante el ya descendido Olimpo.
Luego de manejar la pelota durante los primeros minutos, el local aprovechó las distracciones tácticas del equipo rival y se puso en ventaja rápidamente en el marcador. Leonardo Pisculichi hizo gala de su buena zurda en el amanecer del partido: disparó desde afuera del área y a los 9 minutos el bicho se puso 1 a 0. A partir del gol, el elenco que comanda Alfredo Berti siguió siendo amo y señor de la pelota y la distribuyó con criterio por los costados. Gracias al buen manejo del mediocampo de Fausto Montero y del experimentado Gastón Machín, quienes además supieron cerrarle bien los espacios a los volantes de la visita, Argentinos se asentó en el partido.
Del otro lado, poco y nada hizo el equipo bahiense en esa primera etapa, que apostó más al pelotazo para su delanteros que al juego colectivo.
Argentinos nunca fue mezquino con la pelota y pudo ampliar el marcador en varias oportunidades, producto del buen juego asociado y la profundidad por las bandas de Damián Batallini y Nicolás González.
Ya en el complemento el protagonista absoluto del encuentro fue Olimpo, que no tuvo mucha brillantez en su juego pero le alcanzó para incomodar el arco de Cháves, la figura del partido. Sobre el final, el arquero local le tapó un remate a Lucas Mancinelli que bien pudo haber decretado el empate en la noche de La Paternal. Y de esa jugada derivó la polémica de la noche: tras un córner en el que la pelota dio en el brazo extendido de Nicolás González, el árbitro Pablo Dóvalo se llevó el silbato a la boca pero pareció haberse arrepentido en cuestión de segundos. Todo Olimpo se fue sobre Dóvalo reclamándole el penal y el cierre del partido fue a pura polémica.
Esta victoria le otorgó al Bicho tres puntos fundamentales en su lucha por ingresar a la Copa Sudamericana. Aunque en La Paternal no se conforman: saben que con este triunfo - quedó a dos puntos de Talleres, el último en clasificar- el sueño de jugar la Copa Libertadores 2019 sigue latente, y no piensan despertarse. ■