Murales para encontrar a chicos perdidos
Creadores porteños se sumaron a la campaña #ParedesQueBuscan, de Missing Children. Ya hicieron seis obras en distintos barrios y siguen. Apuestan a reforzar la visibilidad con las fotos de las pinturas que se comparten en las redes sociales.
Un grupo de artistas porteños se sumó a la campaña #ParedesQue Buscan, de Missing Children. Ya pintaron obras en seis barrios y las replican en las redes sociales. Sólo en 2017, se denunciaron 2.571 casos de chicos extraviados en todo el país.
Especial para Clarín
La mirada del grafitero Byga B se dirige hacia la impresión láser que sostiene en la mano izquierda. Está en Palermo Soho, a cuadras de otro mural suyo, en una zona que desborda de arte callejero. Con la mano derecha traza gestos con aerosol. Es el rostro de Enzo Baltazar Vallejos, de 17 años, visto por última vez en Corrientes el 13 de octubre 2017, que va apareciendo en la fachada de un taller mecánico de la calle Godoy Cruz al 1800. Su caso es uno de los que maneja la organización Missing Children Argentina, que lanzó en marzo la campaña #ParedesQueBuscan, con el objetivo de poner el street art al servicio de hallar niños y jóvenes.
“Siempre decimos ‘prestanos tus ojos’ porque necesitamos que la gente se detenga a mirar los rostros para poder reconocerlos y encontrar a los chicos”, explica Lidia Grichener, presidente de Missing Children Argentina. Dirige el organismo desde 2001 e insiste que el street art constituye una herramienta de alto impacto. “No es sólo un dibujo en la calle, es una forma de comunicación de lo que pasa en la sociedad”, analiza la dirigente de la ONG.
Esto lo saben muy bien los artistas que respondieron a la convocatoria y ya están creando murales en distintos puntos de la Ciudad. Entre ellos, se encuentra Chispa, quien retrató a Daiana Garnica, de 17 años, desaparecida desde el 6 de mayo 2017 de la localidad de Alderetes, Tucumán. El rostro, detalladamente pintado con pincel en escala de grises, está sobre una pared exterior de la terminal del 176, en Fitz Roy y Castillo, Villa Crespo. “Este tipo de proyecto le da el porqué a la fidelidad de la ilustración al modelo”, indica Chispa. “Acá la reproducción no responde al ego o a una obsesión del artista. Este mural debe resultar útil para que la gente pueda reconocer a los chicos”, explica a este diario.
Para Missing Children hay dos factores fundamentales para encontrar a los chicos: la visibilidad y el tiempo. “Es falso que hay que esperar cierto plazo para denunciar una desaparición. Estamos trabajando en con- junto con distintas instituciones públicas para concientizar sobre esto, porque la primera hora es la más importante” –recalca Grichener–. Se llama ‘la hora de oro’, ya que mucha información se va olvidando con el paso de los días”.
En el segundo factor interviene #ParedesQueBuscan, ampliando los espacios de difusión, multiplicando los modos de hacerlo. “El criterio principal de selección de chicos para retratar fue la nitidez de sus fotos”, expone Byga B, con 20 años de trayectoria y especialista en retratos. “Sólo disponemos de imágenes diminutas para trabajar, que son las mismas que aparecen en las boletas de servicios y que son poco discernibles. Usamos las más nítidas para poder retransmitir lo más fielmente posible”, expresa el artista de 32 años, de Zona Norte. “Justamente por esto hacemos los murales, para que los rostros sean más visibles y claros”.
La idea de #ParedesQueBuscan surgió de la agencia de publicidad DDB que, como parte de su programa de responsabilidad corporativa, gestiona la cuenta de Missing Children Argentina. La dupla compuesta por el redactor creativo Tomás Ricaurte (28) y la directora de arte Florencia Ramírez (24) gestó este proyecto, que apela a la naturaleza social del street art, pensando en el espacio público como lugar de difusión. Y también en las redes sociales.
“Vas por Palermo el fin de semana y ves a un montón de gente sacando fotos a los trabajos y subiéndolas a las redes”, observa Ricaurte. “Pensa-
mos que los murales podrían ayudar a viralizar la búsqueda y usar la web como un lugar más donde intensificarla”, agrega.
Según el último informe del Registro Nacional de Información de Personas Menores Extraviadas (RNIPME), hubo 2.571 nuevos casos de niños, niñas y adolescentes extraviados en 2017. El 77% son adolescentes de entre 13 y 17 años y el 66%, muje
res.
Ese organismo, que depende de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, advierte una feminización del abandono del hogar por problemas familiares y muestra a Cuyo como la región de más incidencia de extravíos de menores con 537 casos reportados el año pasado.
“Los conflictos familiares en la adolescencia son el motivo principal de extravío de los menores en los casos que vemos”, señala Grichener, y añade que la segunda causa principal con la que tiene que lidiar Missing Children es la sustracción de hijos entre padres.
“Missing Children está buscando entre 100 y 110 niños. Todos los días hay nuevas denuncias pero también, por suerte, muchos chicos aparecen”, explica la referente. “Somos veinte voluntarios que damos nuestro tiempo y cualquier colaboración nos suma. Estos murales son maravillosos, tienen un impacto eficiente. Son una más de las pequeñas grandes cosas que pueden ser determinantes”, afirma la presidente. Hasta ahora se pintaron seis murales y la campaña sigue adelante.