El mundo celebra con cautela los anuncios de Norcorea y reclama un desarme total
EE.UU., Japón y las potencias europeas exigen una “desnuclearización completa, verificable e irreversible”. Aún está en duda si el régimen de Kim aceptará desmantelar todo su arsenal. Es un tema a tratar en la cumbre con Corea del Sur.
El sorpresivo anuncio de Corea del Norte de suspender los ensayos nucleares y misilísticos y desmantelar su base de pruebas fue recibido con gran optimismo por las potencias, desde Estados Unidos a China, pero al mismo tiempo con marcada cautela ya que hay dudas sobre la real intención del régimen de avanzar en un desarmar total de su programa armamentístico.
El anuncio lo realizó este viernes el propio líder norcoreano, Kim Jongun, al hablar ante el Comité Central del Partido de los Trabajadores, órgano máximo de conducción. En su discurso remarcó que adoptaba esa decisión luego de cumplir las metas previstas en el programa, de contar con un arsenal atómico disuasivo.
“Ahora no se necesitan ensayos nucleares ni de misiles de medio alcance o intercontinentales, dado que el trabajo sobre el montaje de ojivas atómicas en proyectiles balísticos ha terminado”, dijo Kim en la sesión.
Con la comprobación “científica” de su potencial armamentístico y la “conclusión exitosa” de su poder atómico hechas, “la misión del centro de test nucleares del norte ha llegado a su fin”, declaró el líder en referencia a la base de Punggye-ri, las instala-
“Ahora no se necesitan ensayos nucleares ni de msiles de medio alcance o intercontinentales”
ciones donde ha realizado sus seis test, el más reciente en septiembre de 2017.
De esta manera el líder norcoreano acepta ahora negociar con las potencias occidentales y sus vecinos, pero establecido ya como una potencia nuclear.
El primero en reaccionar fue el presidente estadounidense, Donald Trump, quien todo el año pasado mantuvo un intenso intercambio de amenazas con Kim. El mandatario consideró “un gran progreso” la suspensión del programa y confirmó su deseo de reunirse con el líder norcoreano, encuentro previsto para los primeros días de junio.
El anuncio, además, se hizo a una semana de la cumbre que Kim mantendrá con el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, quien celebró la medida y dijo que era un paso “significativo” que contribuye a crear condiciones favorables para el desarrollo de esa cita. Las dos coreas negocian un acuerdo de paz definitivo, ya que técnicamente siguen en guerra.
Japón, otro país con el que Corea del Norte ha tenido tradicionalmente conflictos, celebró la decisión de suspender los ensayos y expresó su deseo de esto conduzca a un “completo, verificable e irreversible” desarme del país vecino.
Otro que utilizó las mismas palabras fue el Reino Unido, en plena alianza con Estado Unidos y Francia
tras atacar bases militares y centros de desarrollo de armas químicas en Siria. “Esperamos una desnuclearización completa, verificable e irreversible a través de medios pacíficos”, sostuvo. Estas palabras hacen hincapié en las pretensiones de las potencias occidentales y los vecinos en la península, Japón y Corea del Sur, de lograr el desarme total del Norcorea, algo aún no está definido y genera suspicacias.
Países socios del gobierno norcoreano, como China y Rusia, dieron también la bienvenida al anuncio y se mostraron confiados en que yudará a bajar la tensión en la región.
“China cree que la decisión de Corea del Norte ayudará a mejorar la situación en la Península”, dijo el ministerio de Relaciones Exteriores en un escueto comunicado publicado en su página web. Rusia, en tanto, saludó el “importante paso” dado por Pyongyang en favor de la distensión regional y destacó que se da en “consonancia con la hoja de ruta propuesta por Rusia y China” para la solución del conflicto.
La Unión Europea (UE) y la ONU, que han impuesto sanciones al gobierno norcoreano, festejaron el “paso positivo” del líder, aunque subrayaron que se mantiene expectantes. Naciones Unidas, además de expresar su confianza en que el gesto de Kim permita generar confianza en favor de una desnuclearización de la península coreana, ofreció su apoyo para la misión.
Los analistas están profundamente divididos sobre los motivos que hay detrás del anuncio del régimen norcoreanos. Un sector argumenta que sólo busca ganar tiempo y aliviar las sanciones internacionales, sin abandonar sus armas nucleares.
Otros sostienen que Kim estaría dispuesto a deshacerse de su arsenal con el objetivo de impulsar su economía. Para esto necesitaría los incentivos adecuados, como un tratado de paz con Corea del Sur, garantías de seguridad por parte de EE.UU. y ayuda financiera para reconstruir su economía.