Moyano, un obispo vaticano y las mafias
En la foto aparece Hugo Moyano hablando desde la cabecera de la mesa. Lo flanquean el obispo vaticano Marcelo Sánchez Sorondo y el amigo-vocero del Papa Gustavo Vera. Detrás de ellos hay un cartel con letras grandes: Red Nacional Antimafia, por una Argentina sin mafias. Sin comentarios. Todo a la vista.
El encuentro ocurrió hace poco más de dos semanas en un local del sindicato de Camioneros. Y entre los grandes objetivos proclamados por la red figura la lucha contra el lavado de dinero, un delito que tiene a Moyano contra las cuerdas o que amenaza poner a Moyano contra las cuerdas.
Eso es lo que dicen datos y pruebas recolectados en una investigación judicial sobre su gestión en Independiente. Los tiene en su poder el juez federal de Quilmes Luis Armella a partir del testimonio de un arrepentido: Pablo Bebote Alvarez, ex jefe de la barrabrava. Se acumulan en una bolsa donde hay de todo:
● La contratación de jugadores lesionados y sobrefacturados. Ya fueron allanadas oficinas de la AFA y de Agremiados. Analizan el papel del ex dirigente Fabio Fernández y un paquete de transferencias de plata a paraísos fiscales. También, depósitos derivados a mesas de dinero locales. Está en la mira el fideicomiso Aristides en el que figuran Moyano, Héctor Maldonado y la ex tesorera del club, Liliana Toribio.
● Viajes de la barra y de dirigentes al interior y al exterior que fueron inflados para quedarse con la diferencia. Algunos fueron bancados por Camioneros. Las facturas terminaban en las empresas Turismo Martín SRL y JBUS SRL.
● Desvío de fondos provenientes de la venta de entradas y de la venta en negro de entradas. Y de bonos truchos. De esas maniobras habría participado la compañía Integradores SA.
● Un capítulo especial es el de las extorsiones a empresas como Loma Negra, Acindar y Kalciyan, la más grande fábrica de vidrios de la Argentina. Todo para terminar obras en el estadio. Aprietes a través del sindicato y similares a los que acostumbra hacer el sindicato. Esas operaciones o parte de esas operaciones eran blanqueadas con la constructora Ancora SA, de la esposa de Moyano y a la que Moyano colocó como gerenciadora de la obra social de Camioneros.
● Otra empresa en la mira sobre el lavado de dinero es Global Finanzas, de Fabio Fernández y dueño a la vez de la cadena de restoranes Pertutti. Su mansión en el country Abril fue allanada por el juez en lo Penal Económico Pablo Yadarola.
Moyano tiene siete causas abiertas. Y en el medio una muy notoria: OCA, que ocupa a 7.000 camioneros y supo ser líder del negocio postal. Está en concurso de acreedores y tambalea. Pese a eso sponsorea a Independiente, donde el combo de violencia y corrupción que empezó a destapar la Justicia nadie sabe dónde puede terminar. Cuesta entender qué hace el canciller de la Pontificia Academia de las Ciencias del Vaticano abrazando a Moyano en una cruzada antimafia.
Con aval de la Iglesia, el jefe camionero se monta a una red contra el lavado, delito por el que lo investigan.