Se demora la nueva concesión de Retiro
Toda la zona de Retiro está en obra. En la terminal de trenes del Mitre ya terminó, y la fachada y el imponente hall central recuperaron su viejo esplendo. En la calle, hay cortes, desvíos y grúas trabajando en lo que será el Paseo del Bajo. También en la Villa 31 avanzan la urbanización. Sin embargo, la terminal de ómnibus sigue allí, detenida en el tiempo. Si bien este año iba a licitarse para que el nuevo dueño iniciara su modernización, el proceso no avanzó y todos pronostican que se va a caer.
Consultados por Clarín, desde el Ministerio de Transporte afirmaron que siguen las evaluaciones para la licitación, aunque quienes siguen de cerca esa toma de decisiones ya han planteado la posibilidad de que las propuestas no alcancen y deba relicitarse.
Las cuatro presentaciones para ponerla en valor fueron de empresas nacionales y del exterior. Y los proyectos incluían desde sumarle a la terminal un hotel, la construcción de centros comerciales y de convenciones.
Fuentes del sector aseguraron que el Gobierno no quiso pagar el costo político de otorgar la concesión a la oferta de los continuadores de Néstor Otero. Es el empresario que fue acusado de pagarle dádivas al ex secretario de Transporte Ricardo Jaime, causa que se cerró con una probation. La empresa TEBA, de Otero, continuará en Retiro y mientras tanto dispondrá de mayor seguridad y hará obras de iluminación y refacciones en los baños.