Macri quiere el apoyo de más gobernadores
Tras la cumbre del jueves, el Presidente tiene previsto convocar a más mandatarios la semana próxima.
En un momento de tensión por la crisis económica, el Presidente busca apoyo y la próxima semana convocará a otro grupo de gobernadores para interiorizarlos sobre las conversaciones que se iniciaron con el Fondo Monetario Internacional.
Así lo pudo confirmar Clarín de altas fuentes oficiales. A los 7 gobernadores opositores que pasaron el jueves por Casa Rosada se sumarían varios más.
Aunque el cronograma aún no está definido, entre los que ya fueron contactados se encuentran los peronistas Lucía Corpacci (Catamarca), Gildo Insfrán (Formosa) y los patagónicos de partidos provinciales Claudio Arcioni (Chubut), Omar Gutiérrez (Neuquén), Alberto Weretilneck (Río Negro).
Todavía no está claro cómo será (si todos juntos o encuentros "mano a mano") ni cuándo. "Pero será seguramente la próxima semana", adelantaron en el Gobierno.
Además de apoyo político, la convocatoria al Gobierno le permite dar señales de mayor apertura hacia la política, uno de los cuestionamientos que unía a un sector de sus aliados de Cambiemos con la oposición.
Algunos de los mandatarios que desembarcarían en el despacho presidencial ya se mostraron abiertos a escuchar y no cuestionar públicamente al Gobierno por su acuerdo con el FMI.
Uno de ellos fue el rionegrino Weretilneck, quien desdramatizó la decisión al afirmar que "todos los países están en el Fondo, no me hace ruido ir al FMI".
Otros mandatarios, como el riojano Sergio Casas, fueron muy duros. "El Presidente está citando a los gobernadores justicialistas porque quiere un compromiso de todos con la receta del Fondo Monetario Internacional. Está pidiendo que los gobernadores dejen gente en la calle", cuestionó.
Cerca del riojano explican el porqué de su enojo: "Cuando ganaron las elecciones destrataron a los gobernadores, los subestimaron y ahora que los necesitan resulta que los vuelven a llamar". Aunque este viernes recibió en su provincia a la vicepresidenta Gabriela Michetti, no cambió de opinión. El único que puede convencerlo, afirman, es el ministro del Interior Rogelio Frigerio.
Algunos mandatarios que estuvieron con Macri el jueves se mostraron molestos luego, como el tucumano Juan Manzur. En su entorno dejaron en claro que el gobernador “no apoya el acuerdo con el FMI ni las políticas” del Gobierno y sólo concurrió a una reunión “institucional”.
En el grupo de los que están en duda se encuentra la santacruceña Alicia Kirchner. El jueves, la Nación le otorgó un préstamo por 137,5 millones de pesos a su provincia para atender necesidades financieras en el marco del programa de Convergencia Fiscal. Acaso eso sirva para ablandarla. De todos modos, desde Santa Cruz explicaron que no fueron informados oficialmente de la reunión.
Los casos “perdidos” para el Gobierno son los del puntano Alberto Rodríguez Saá, quien este viernes apuntó que el "plan de Macri fracasó" y que se empezó "a perder soberanía", y el pampeano Carlos Verna. ■