Conmoción en México por el asesinato de otro periodista
Juan Carlos Huerta, de 45 años, fue atacado a tiros en el Estado de Tabasco. Es el cuarto caso en el año.
Los homenajes en México por el primer aniversario del asesinato de Javier Valdez, un reconocido periodista especializado en narcotráfico, se vieron empañadas ayer por el homicidio de otro reportero, el cuarto en lo que del año en ese país. El crimen fue condenado enseguida por la comunidad internacional, en medio de una creciente sensación de impunidad y de falta de protección de los comunicadores.
El reportero y locutor de radio y TV Juan Carlos Huerta, de 45 años, fue asesinado a la mañana cuando salía de su casa en las afueras de la ciudad de Villahermosa, capital del estado sureño de Tabasco.
La policía buscaba una camioneta gris de la que había bajado un sujeto que abrió fuego contra Huerta en una zona popular de esa localidad, señaló la fiscalía de Tabasco en un comunicado.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) condenó “de manera enérgica” el asesinato de Huerta y exigió a las autoridades competentes “una investigación pronta, objetiva e integral que prevenga que este caso quede en la impunidad, investigación que necesariamente deberá contemplar como una de sus líneas la vinculada a la labor periodística” de la víctima.
Naciones Unidas, la Unión Europea, la Sociedad Interamericana de Prensa y la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) también condenaron el crimen y expresaron su preocupación por los más de 100 periodistas asesinados en México desde el año 2000. La mayoría de esos casos permanecen impunes.
Huerta es, según RSF, el cuarto periodista abatido en lo que va de 2018 en México. Antes de él, fueron ultimados Carlos Domínguez en enero en Tamaulipas (noreste), Leslie Ann Pamela Montenegro en febrero en Guerrero (sur), y Leobardo Vázquez en marzo en Veracruz (este).
El crimen, el último en un país que se ha convertido en uno de los lugares más letales para la prensa, junto con Siria, alimentó la indignación de las protestas que habían sido convocadas para reclamar justicia por el asesinato de Valdez y de las decenas de periodistas asesinados en México.
Valdez, quien tenía 50 años y cuyo asesinato conmocionó el año pasado al gremio periodístico mexicano, fue fundador del semanario Ríodoce, que se publica en Sinaloa, corresponsal del diario La Jornada y colaborador de la AFP durante una década.
Para recordar a este periodista se organizó desde el sábado una Jornada Nacional de Protesta. Este martes cientos de personas caminaron de la catedral de Culiacán a la fiscalía regional con pancartas que decían “¡Justicia para Javier!” y “¡No al miedo!”. Valdez fue asesinado a balazos, a plena luz del día y a unas calles de las oficinas del semanario, en Culiacán. El presidente Enrique Peña Nieto, que contadas veces se pronuncia sobre asesinatos de periodistas, prometió castigar a los responsables.
Tras casi un año de reclamos de justicia y silencio de las autoridades, el 23 de abril se anunció la primera captura relacionada con el asesinato y se reconoció que las primeras indagatorias apuntan a que el trabajo de Valdez sería el móvil del crimen. Pero aún hay muchas voces que piden la captura de los demás implicados. ■