La empresa constructora y el Municipio aseguran que tenían todo en regla
Estaba previsto hacer un estacionamiento y dos locales. Aún no determinaron las causas del derrumbe.
La remodelación en el teatro Florencio Parravicini tenía la habilitación correspondiente. El expediente 140.213/16 fue aprobado por la Dirección de Catastro de la municipalidad tucumana. La firma responsable de los trabajos en el edificio -que tenía más de 90 añosasegura que todo estaba en regla. La reforma tenía previsto realizar dos locales comerciales y una playa de estacionamiento en el fondo del terreno, que tiene unos 60 metros. Y estaba previsto mantener el reconocido frente de estilo francés del viejo cine y teatro.
Antonio José Fortino, socio de la firma y director técnico de la obra, emitió un comunicado en el que manifiesta su pésame a las familias de las víctimas. El ingeniero aseguró que contactó al fiscal Diego López Avila, para ponerse a su disposición y asegura que la obra disponía de todas las autorizaciones correspondientes y se ajustaba a las normas vigentes de seguridad e higiene.
Ayer no hubo información oficial de cuáles podrían haber sido las causas del siniestro. Walter Berarducci secretario de Gobierno municipal y Pablo Lazarte, subdi- rector de Catastro, aseguraron que no conocían los rumores que insinuaban que había peligro de derrumbe. Berarducci señaló que “es temerario opinar en este momento. Debemos esperar los resultados de las medidas judiciales tanto para determinar las causas como las responsabilidades”.
“La obra comprendía dos locales comerciales y una playa de estacionamiento, e iba a conservar la fachada antigua -sin retranqueo-. El trámite está completo y fue desarrollado como corresponde. Lo iniciaron en octubre de 2016 con la presentación de un anteproyecto. Luego aprobamos el proyecto, y dimos el visto bueno al plano de arquitectura, instalación eléctrica y sanitaria. Al ser una refacción, no hay exigencia de planos de estructura”, explicó Lazarte.
En declaraciones al diario La Gaceta, el secretario apuntó que “la responsabilidad es del profesional a cargo, en este caso, del ingeniero Antonio J. Fortino” e insistió en que “aquí hay una cuestión formal cumplida en el tiempo y de la manera que establece la normativa vigente”. Por su parte, Lazarte expresó que la Municipalidad controlaba si la propiedad era apta para el destino proyectado y que, por estar implicado un edificio viejo, intervino la Dirección de Planeamiento, que avaló la reforma.
En tanto el arquitecto Ricardo Rulli, ex presidente del Colegio de Arquitectos local, advirtió ayer que “hay muchos edificios públicos, hoy cerrados y en desuso, que están peor que el Parravicini”. ■