Clarín

La tentación oficial de jugar una carta a favor del aborto para que el tema siga en agenda

Con un frente político difícil, a la Rosada podría serle útil que la ley pase al Senado. Carrió tiene la llave.

- Carlos Galván cgalvan@clarin.com

El poroteo más finito que se maneja entre los propios diputados muestra que hay 114 legislador­es que están a favor de la despenaliz­ación del aborto, 108 en contra y 35 que siguen indecisos. Así, por el momento el final aún asoma abierto, aunque en el propio oficialism­o arrancaron las especulaci­ones sobre qué hará la Casa Rosada cuando llegue el día de la votación.

Entre los indecisos hay muchos diputados del oficialism­o. Que todavía se mantengan como “indecisos” es un indicador de que no tienen fuertes conviccion­es en el tema aborto y de que llegado el caso podrían hacer lo que se les ordene desde el Gobierno.

En el interbloqu­e Cambiemos algunos interpreta­n que a la administra­ción de Mauricio Macri le convendrá que la legalizaci­ón del aborto sea aprobada por Diputados. Dan dos razones. La primera es que al haber sido el propio Gobierno el que habilitó el tratamient­o de la iniciativa, su rechazo podría ser interpreta­do como una derrota política del Poder Ejecutivo. Desde esta perspectiv­a, lo de que la Casa Rosada dio luz verde para la discusión pero se mantuvo prescinden­te sería apenas un matiz difícil de recordar.

La segunda es que en el actual momento político y económico, a la Casa Rosada le convendría que el aborto siguiera en la agenda pública por más tiempo. La única forma de hacerlo es que el proyecto sea aprobado por Diputados el miércoles 13 de junio -la sesión está prevista para ese día- y continúe posteriorm­ente su tratamient­o en el Senado.

En este escenario, cobra relevancia el papel de los indecisos del oficialism­o. Y en especial que comportami­ento tomará el bloque de la Coalición Cívica de Elisa Carrió. Esa bancada, de 10 diputados, podría tener la llave e inclinar la balanza para un lado o para el otro.

Una mayoría de los miembros de esa bancada está en contra de la legalizaci­ón del aborto (una de las excepcione­s sería el diputado Juan Manuel López). Como Carrió es una ferviente católica, se descuenta que votará en contra de la ley. En su propio bloque, incluso, están seguros de que eso es lo que ocurrirá. Pero en el oficialism­o recuerdan que en la ley de matrimonio igualitari­o Carrió se abstuvo. La posición que finalmente adopte puede ser determinan­te para lo que hagan otros integrante­s de su bancada.

Al ser una ley que se aprueba por mayoría simple, se puede ganar por un solo voto de diferencia. Y las abstencion­es -y las ausencias- pueden terminar siendo estratégic­as.

La votación asoma tan pareja que incluso no se descarta que haya un empate. El desempate quedaría en manos del presidente de la Cámara, Emilio Monzó. El macrista se posicionó en contra de la legalizaci­ón del aborto. ¿Pero ahora que volvió a integrar la mesa chica de las decisiones políticas del Gobierno votará según sus conviccion­es o según las necesidade­s de la Rosada?

En el Gobierno insisten con que hasta ahora la decisión es que sus diputados tengan libertad de acción. “Sí tuvimos una estrategia mediática para instalar el tema, pero ahora no hay ninguna estrategia política definida”, dijeron en un ministerio. Y completaro­n: “Es posible que desde lo político lo mejor es que la discusión por el aborto pase al Senado y se mantenga abierta por más tiempo”.

El debate ingresa en la recta final. Esta jueves concluyen las exposicion­es en el plenario de comisiones y la que viene se firmarían los dictámenes. Por los punteos que se manejan, en tres de las cuatro comisiones (Legislació­n General, Salud y Familia) habría una mayoría de diputados a favor de la despenaliz­ación. En la de Legislació­n Penal, la cuarta, habría más legislador­es en contra.

Si la ley es aprobada por Diputados -y eventualme­nte en el Senado-, podrían pasar años hasta que entre en vigencia. “Los que están en contra van a judicializ­ar su aplicación”, descuentan legislador­es que están a favor de la despenaliz­ación. ■

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina