Asesinan a puñaladas a un ingeniero jubilado y dejan gravemente herida a su mujer
Creen que fueron víctimas de una entradera. El hombre, de 84 años, era profesor de la Universidad de Morón. Su esposa, de 88, quedó internada en estado crítico.
Cuando el hijo de Roque Álvaro Terreu (84) llegó al departamento de Villa Santa Rita encontró a su padre muerto. A pocos metros, su madre estaba rodeada de un charco de sangre. Los dos jubilados fueron atacados a puñaladas en lo que, sospechan, podría haber sido una entradera. Roque era ingeniero y, a pesar de su edad, todavía se desempeñaba como profesor en la Universidad de Morón.
Todo empezó el viernes, cuando Roque faltó a una clase de Geometría Analítica que tenía que dictar a sus alumnos de la Facultad de Ingeniería. Pero fue recién el sábado que los encontraron.
La empleada que se encargaba de cuidar al matrimonio golpeó la puerta y, como nadie respondía, se fue. Preocupado, un vecino llamó al hijo de Roque al celular para alertarlo de la situación: nadie atendía en el departamento del 5° piso de Calfucurá al 2800, a metros de la avenida Nazca, en el centro geográfico de la Capital Federal.
El hijo del matrimonio, que vive a diez minutos de la casa de sus padres, en Villa Pueyrredón, se apresuró para ver qué estaba pasando. Al llegar, sintió “un fuerte olor a gas” y se encontró con la escena fatal. Su padre muerto, su madre golpeada en el piso de la cocina, los dos cubiertos de sangre.
La mujer, de 88 años, estaba viva y fue trasladada de urgencia al hospital Vélez Sarsfield. Allí tuvieron que operarla por las heridas de arma blanca que tenía en su cuerpo. Al cierre de esta edición se encontraba sedada, con asistencia respiratoria mecánica, fiebre y pronóstico reservado, en estado crítico.
Anoche, además, realizaban la autopsia para determinar cómo murió Roque, que en principio tendría “va- rias lesiones de arma blanca”.
Fuentes de la Policía de la Ciudad informaron a Télam que “se realizó un relevamiento en las zonas aledañas a la escena del crimen en busca de cámaras de seguridad que hayan podido captar imágenes de los movimientos de el o los asesinos”.
“Los investigadores no descartan ninguna hipótesis sobre lo ocurrido. Una de las líneas investigativas apunta a un posible intento de robo bajo la modalidad entradera”, agregaron los mismos voceros. En ese sentido, procuraban establecer si se habían llevado dinero u objetos de valor de la casa de los jubilados.
Terreu se había recibido de ingeniero electromecánico en la Universidad de Buenos Aires (UBA) en 1968. Dos años más tarde empezó a trabajar en la Universidad de Morón (UM), como jefe de Trabajos Prácticos en la Facultad de Ingeniería. Con 84 años En 1968 se graduó en la Universidad de Buenos Aires (UBA) como ingeniero electromecánico, con orientación electricista. Dos años después empezó a dar clases en la Universidad de Morón (UM). seguía allí dando clases de Geometría Analítica.
“Ejercía dos horas por semana, como consultor de Geometría Analítica. Explicaba muy bien y los chicos lo querían mucho. Le gustaba dar clases y formar docentes, por eso seguía a pesar de estar jubilado. Sólo venía ese día, por eso llamó la atención que no haya estado porque era de cumplir. Estamos consternados”, dijeron a Clarín en el rectorado de la casa de estudios.
“Tuve el agrado de tenerlo en los primeros años de la carrera. Era una persona grande, destacada por enseñar a varias generaciones. Ayer me enteré de esta trágica noticia, que forma parte de nuestra realidad. Qué tristeza. Que en paz descanse, gracias ingeniero”, publicó Facundo, ex alumno, en las redes sociales.
“Con mucha tristeza comunico a mis alumnos de ingeniería que falleció el ingeniero Terreu, víctima de una entradera en su casa”, publicó otro de sus compañeros de la UM. “Fue un maestro para los que tuvimos el honor de trabajar a su lado. Un ejemplo de rectitud, de compromiso y entrega a su labor docente, siempre queriendo lo mejor de los futuros ingenieros. Querido amigo y compañero, simplemente gracias, que descanses en paz y brille para ti la luz que no tiene fin”, cerró.
En el entorno familiar del ingeniero se manifestaron “conmocionados” por lo que le pasó al matrimonio. “Todavía no nos entregaron el cuerpo, la noticia conmovió a toda la familia”, contaron a Télam.
La causa quedó caratulada como homicidio y lesiones graves, a cargo de Adrián Peres, de la Fiscalía Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 46 de Capital. Hasta anoche no había ningún detenido. ■