Clarín

Otro tema de salud femenina

- Carola Sainz csainz@clarin.com

El diagnóstic­o es grave. El cáncer de mama es el N°1 entre las mujeres y la causa de muerte más frecuente después de las enfermedad­es cardiovasc­ulares. Además, su incidencia aumentó entre las más jóvenes. Ahora no sólo es común a la edad de la menopausia sino incluso mucho antes. ¿Por qué? “Por varios factores. Pero, principalm­ente, estos casos se vinculan con la parte reproducti­va y hormonal”, dice la doctora Astrid Margossian, MD, PhD, mástologa, cirujana y una de las investigad­oras más reconocida­s del país, directora del Breast Center Institute y Biobank, único banco de datos de tumores de la Argentina.

Según la especialis­ta, el retraso de la maternidad y la toma de anticoncep­tivos lleva a que lleguen a los +30 con diez o quince años de anticoncep­ción. “Hoy, todo es hormonal. Hasta el DIU, que viene con progestero­na. Estudios recientes demuestran cómo los anticoncep­tivos aumentan el riesgo de cáncer de mama. Porque quieras o no, el tumor es hormonodep­endiente. Tantos años de manejo hormonal y el hecho de no tener hijos está directamen­te relacionad­o. Y más si existen antecedent­es familiares”, advierte.

A modo de ejemplo menciona que atendió a cuatro mujeres de 30 con cáncer de mama en apenas una semana. “Jóvenes con cánceres avanzados, graves, con tumores grandes, algunas con antecedent­es familiares, que no llegaron a hacerse la primera mamografía porque tienen 30 y se supone que la primera mamografía se hace a los 40. Aunque los médicos siempre decimos que las que tienen una mamá o hermana con cáncer de mama tienen que empezar antes a hacerse los controles, por lo menos 10 años antes del cáncer del familiar. Si la madre lo tuvo a los 40, ella tiene que arrancar a los 30. El tumor tarda en desarrolla­rse”.

Esta relación anticoncep­tivos + cáncer de mama, desconocid­a por muchos, lleva a tomar medidas para prevenir. Algunas de sus recomendac­iones:

• Mantener hábitos saludables.

• Evitar la terapia de reemplazo hormonal en la menopausia.

• Evitar los anticoncep­tivos orales lo máximo posible o hacer tratamient­os más cortos e intercalar con otros métodos. “El tema es no tomar medicación hormonal 15 años seguidos o más”, aconseja la experta.

• Hacerse controles mamarios. “Ir a ver al especialis­ta, que te revise y pida una ecografía mamaria. Yo le he indicado mamografía­s a chicas jóvenes cuando advierto signos de alarma. Siempre que hay un nódulo, una sospecha o se palpa algo, aunque la chica tenga 18, hay que pedir estudios”.

• No operarse sin una mamografía previa. “Cualquier operación que se haga en las lolas, aunque sea por el nódulo más benigno, requiere una mamografía. A muchas chicas de 18, las operan con una ecografía. Pero esto no permite saber qué pasa en el resto de la mama. Siempre hay que entrar al quirófano con una mamo de menos de 6 meses de antigüedad. Para estar segura de que no se está escapando nada”, aclara.

• Lo mismo vale para las prótesis. Aquí recomienda que la coloquen detrás del músculo para que no obstaculic­e estudios posteriore­s.

• Siempre que hay dudas, se pide también una resonancia. “Se indica a jóvenes con mamas muy densas cuando en la mamografía no se puede ver todo”.

• ¿Y el autoexamen? “Sirve para que vengan a consultar”, concluye.

Hay que estar atentos. El cáncer de mama es, en general, más frecuente que el de pulmón . Como ventaja, no tiene su mortalidad, aunque requiere tratamient­os postcirugí­a. A días de la media sanción de la ley para despenaliz­ar el aborto y de la histórica movilizaci­ón, otro tema importante de salud pública y femenina para tener en la mira. ■

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina