Sin el acuerdo con Europa, Faurie apunta a las relaciones con China
El canciller dijo que se abrieron nuevos mercados con ese país y resaltó la posible llegada de inversiones.
China comienza a gravitar fuerte en el Mercosur y no sólo por el comercio; también por el nivel de inversiones y negocios en diversos proyectos de infraestructura. Pero el caso de la Argentina si se quiere es especial: “Es importantísima nuestra relación comercial” con la gran potencia asiática. Quién lo definió así fue el canciller Jorge Faurie, en una entrevista exclusiva con Clarín durante la cumbre del Mercosur en Asunción. El jefe del Palacio de San Martín no tiene dudas: “Es notable la apertura que ha hecho China con la Argentina. Nos ha ofrecido hacer compras directas de sus empresas estatales para empresas argentinas interesadas en vender en ese país”.
-¿Qué explica esas preferencias? Indagó Clarín en la entrevista que el canciller le concedió a este diario durante la cumbre del bloque sudamericano. “No olvide que China nos acaba de abrir su mercado de carnes y frutas” indicó. “Y eso es porque tiene un relacionamiento clave con muestro país”. Añadió además: “Nosotros tenemos una balanza comercial deficitaria con China. Y este país, conciente de la magnitud del déficit, abrió todos los canales de diálogo y de negociación para que lleguen más productos argentinos”. Faurie admitió que eso “no será suficiente para bajar el déficit. Pero nosotros reconocemos como un esfuerzo especial de la parte china. Ellos participan en inversiones en numerosas obras de infraestructura”.
Durante la cumbre del Mercosur, el presidente uruguayo Tabaré Vázquez insistió en la necesidad de avanzar en las negociaciones con la potencia asiática, del bloque como conjunto. Pero también demandó a sus colegas sobre la posibilidad de flexibilizar la rigidez que hoy impone el bloque regional en las negociaciones externas. Esta estructura “férrea” hoy restringe la posibilidad de cada miembro de la región de avanzar en acuerdos con mayor rapidez o en for- ma independiente de sus socios.
Faurie fue categórico: “Todos coincidimos con Uruguay que en 2020 tenemos que analizar cuál es el mecanismo con el cuál tenemos que trabajar en términos de relacionamiento externo. Debemos rediscutir la si- tuación de hoy”.
-¿Qué significa eso?
La Unión Aduanera dura, tal como está hoy día, es un mecanismo rígido. Y debemos pensar en cómo reformularlo. Hay muchos instrumentos para hacerlo: en algunos casos pueden ser acuerdos de libre comercio, como ya hemos planteado con países de la región, individuales o colectivos. También pueden ser preferencias arancelarias bilaterales. En cada caso, debemos analizar cuál es el impacto. Hay que señalar que la flexibilidad es una de las características que Argentina trajo al comercio exterior desde el gobierno Macri.
-¿Brasil está de acuerdo?
Mire, Brasil tiene el peso que le da poseer un mercado muy relevante. Y siempre lo pone sobre la mesa de negociaciones regionales o biregionales. Ellos dicen: a estas negociaciones traemos un mercado de 200 millones de habitantes. Pero todos estamos de acuerdo que debemos comenzar ya a resolver la flexibilización en las negociaciones externas.
-¿En qué estado están los trámites con la Unión Europea?
Las negociaciones con la UE nos ha ido generando alineamiento en el interior del Mercosur. Ha sido muy largo el trabajo con Europa y en este momento no podemos pasar por alto que es preciso una negociación política. Tenemos que superar la instancia técnica y para eso tenemos previsto una ronda de negociación en julio en Bruselas. Allí se verá la voluntad política europea. ■
“Tenemos una balanza deficitaria con China, pero llegan más productos argentinos”.