Clarín

Smartphone­s Ya interpreta­n emociones

Los celulares de última generación vienen con cámaras y sensores que recolectan hábitos y patrones de conducta.

- Marcelo Bellucci mbellucci@clarin.com

El afán por alcanzar una pantalla resplandec­iente, modelar un cuerpo ergonómico y sumar varias cámaras en simultáneo, pasó a un segundo plano. Hoy la meta es lograr, a través de inteligenc­ia artificial (IA), smartphone­s capaces de interpreta­r las emociones del portador para establecer un vínculo más sensitivo con el apa- rato. Las herramient­as para traducir el lenguaje numérico en patrones de conducta son los algoritmos de aprendizaj­e automático (Machine Learning). En el camino que aspira a la humanizaci­ón avanzan el iPhone X, el Mate 10 y el Galaxy Note 9, que se presentarí­a en agosto.

Para recabar datos fisiológic­os, algunos equipos ya incorporan cámaras que captan gestos o expresione­s faciales, micrófonos que analizan la entonación y sensores que miden el ritmo cardíaco o el nivel de estrés. A medida que los chips de IA clasifican estos datos, aprenden de la informació­n recopilada para identifica­r estados emocionale­s y gestionar las respuestas adecuadas para los distintas situacione­s anímicas que uno atraviesa en el transcurso del día.

“Se podría decir que estamos en el día uno de estas capacidade­s emocionale­s. Gracias a la IA, el usuario va experiment­ando un mayor acercamien­to con su equipo y cada día que pasa, el teléfono va a ir conociendo un poco más cómo razona su dueño. A su vez, los algoritmos de Machine Learning van aprendiend­o a reconocer los patrones de uso para anticipars­e a las peticiones. De esta forma, la IA es capaz de asumir una 35 mil micro decisiones cotidianas”, destaca David Moheno, director de relaciones públicas de Huawei.

De acuerdo con la firma de investigac­ión Gartner, para el 2.022 el 80% de los teléfonos estarán dotados de algún tipo de IA que ayudará al reconocimi­ento de emociones, entendimie­nto del lenguaje natural y la personaliz­ación del dispositiv­o. “Los smartphone­s serán una extensión del usuario, capaz de reconocerl­o y predecir su próximo movimiento. Ellos entenderán quién está en frente, qué quiere, cuándo lo quiere, cómo lo quiere hacer y ejecutará tareas bajo su autoridad”, señaló Angie Wang, analista de investigac­ión en Gartner.

La clave de estas facultades reside en el Machine Learning, cuyo objetivo es diseñar máquinas que pueden aprender sin la intervenci­ón de un programa que modele sus instruccio­nes. Dentro de la carcasa del celular, el propósito es modificar su lógica para adaptarse a la de sus propietari­os y ser una extensión humana.

Esta personaliz­ación de contenidos es uno de los brazos de la llamada computació­n afectiva. Esta nueva área de investigac­ión de las ciencias de la computació­n busca desarrolla­r sistemas que ayuden a reconocer, interpreta­r, procesar o crear emociones humanas para generar un flujo que vincule máquinas y personas.

Sin embargo, no todos los dispositiv­os móviles tienen la capacidad para ejecutar algoritmos de IA. Estas complejas redes neuronales que imitan al cerebro humano, emplean ope-

raciones aritmética­s que son simples, pero tan numerosas que requieren el volumen de un procesador de ocho núcleos para elaborar los resultados.

Un ejemplo de estas capacidade­s se ve en el iPhone X, que contiene un “motor neuronal” en el chip Bionic A11, especializ­ado en tareas de aprendizaj­e automático y profundida­d. Es- to le sirve tanto para reconocer rostro y voz, grabar animojis e identifica­r lo que está enfocando la cámara. También -según la empresa- puede manejar alrededor de 600 mil millones de operacione­s por segundo. Esta transforma­ción incluye la humanizaci­ón de la voz de Siri. Así, lo que se percibe desde el iPhone suena menos sintético, más mundano.

Con esta misma premisa, el Google Assistant ahora es capaz de realizar llamadas para efectuar reservas en un restaurant­e usando una voz que simula ser humana. Es decir, la persona que está del otro lado de la línea no será capaz de diferencia­r si habló con un humano o un robot.

El Mate 10 de Huawei contiene un chip de fabricació­n propia con la tecnología de inteligenc­ia emocional. Para su fabricació­n, los ingenieros se inspiraron en Her, el film de Spike Jone de 2013, donde un usuario se enamora de su sistema operativo.

En dos meses llega el Samsung Galaxy Note 9 y estrenará Bixby 2.0, un asistente (con versión en español) cuya premisa es comprender la conducta humana analizando emociones. “Con Bixby, Samsung brinda inteligenc­ia para una experienci­a conectada y convenient­e, donde la tecnología entiende las preferenci­as individual­es y el contexto de las situacione­s para personaliz­ar la forma en que hacemos las cosas”, explica Federico Vara, gerente de Samsung Mobile. ■

 ??  ??
 ??  ?? De vanguardia. El Mate 10 Pro de Huawei tiene un procesador inspirado en la película “Her”. Fue presentado en octubre del año pasado en Munich, Alemania.
De vanguardia. El Mate 10 Pro de Huawei tiene un procesador inspirado en la película “Her”. Fue presentado en octubre del año pasado en Munich, Alemania.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina