Las prepagas aumentarán 7,5% en agosto y en el año la suba ya supera el 20%
Es el tercer ajuste del año. Sin embargo, desde el sector dicen que estos incrementos “resultan insuficientes”.
A través de la Resolución 1239/2018, el Ministerio de Salud autorizó a las empresas de medicina prepaga a aumentar a partir del 1 de agosto un 7,5% las cuotas de sus afiliados.
Es el tercer aumento en el año. Los anteriores fueron del 4% en febrero y 7,5% desde junio. Por tratarse de aumentos acumulativos, suman 20,2%. Se descuenta que habrá otros aumentos antes de fin de año acompañando los mayores costos médicos, la devaluación del peso y la inflación creciente. Las empresas de medicina privada ya solicitaron nuevos aumentos para después de agosto.
El sector cuenta 6 millones de beneficiarios, de los cuales 1.200.000 son voluntarios. Del resto, el grueso deriva sus aportes de la Seguridad Social a la prepaga a través de las obras sociales pagando, en caso de corresponder, la diferencia con relación al monto del plan privado. Otro sector menor corresponde a planes corporativos de empresas.
Por la caída de los ingresos reales de la gente, viene disminuyendo la adhesión a la medicina prepaga. Los planes de las prepagas tienen un costo promedio de $ 3.500 para una persona de edad mediana, mientras para un matrimonio joven con dos hijos menores, en un plan sin reintegros, ronda los $ 8.500.
Ahora las prepagas deben informar a sus afiliados del aumento de la cuota para efectivizar el incremento desde el 1 de agosto.
Según la Resolución de Salud, el incremento en las cuotas está “fundado en variaciones de la estructura de costos de las empresas” realizado por la Superintendencia de Servicios de Salud, teniendo en cuenta, entre otras cosas, “los cálculos actuariales necesarios, la verificación fehaciente del incremento del costo de las prestaciones obligatorias, suplementarias y complementarias” y “el incremento de costos de recursos humanos”.
En las prepagas dicen que estos aumentos “resultan insuficientes a la luz de la modificación de las variables económicas”.
Hugo Magonza, titular de ACMI (Asociación Civil de Actividades Médicas Integrada) le dijo a Clarín que
“la atención médica, además de contener un alto componente de trabajo calificado, es significativamente afectada por el incremento en el tipo de cambio. Prácticamente todos los equipos, repuestos e insumos requeridos para su utilización son importados. Igualmente, la innovación en medicamentos biológicos de altísimo costo, cuya incorporación es con-
tinua, progresiva y acumulativa es de origen extranjero y se correlaciona directamente con la cotización al día de adquisición. La amplia mayoría de las prótesis se adquieren de la misma manera”.
Los cálculos de Magonza arrojan que “los mayores costos de la actividad, en una estimación muy conservadora, implicarán un incremento de
no menos 34,6% para el presente año. A ello debe agregarse el impacto de la denominada inflación médica”.
El directivo de la medicina privada anticipó que solicitaron a la Superintendencia de Servicios de Salud que “nos autoricen aumentos adicionales directamente relacionados con los incrementos de costos que inexorablemente deberemos afrontar”. ■