Luego de ver a Sánchez, el presidente catalán insiste con la independencia
Cinco semanas después de haber barrido de la Moncloa a Mariano Rajoy con el apoyo de los independentistas catalanes, el socialista Pedro Sánchez cumplió su promesa y se sentó a dialogar con Quim Torra, el presidente de la Generalitat, que llegó a Madrid con una idea fija: poner sobre la mesa el derecho a la autodeterminación catalana.
Fue ayer lunes, en el Palacio de la Moncloa, donde Sánchez, quien lleva días hablando de la necesidad de “normalizar la relación con Cataluña”, conversó con Torra durante casi dos horas y media.
“Ha sido una reunión larga, sincera, y de diálogo franco -admitió Torra al salir del encuentro-. He visto a un presidente Sánchez que ha escuchado y que ha tomado nota. Esto me ha gustado. Y rescato que estamos de acuerdo en que la cuestión catalana se trata de un problema político que tiene que resolverse políticamente”.
Torra destacó: “Sobre los dos asuntos centrales -la autodeterminación y los presos independentistas- mantenemos posiciones divergentes: el elemento central para abordar la cuestión catalana es el derecho a la autoderminación. He recordado al presidente Sánchez que el pueblo de Cataluña se autodeterminó el 1 de octubre (fecha del último referéndum) -dijo-. Es una fecha fundacional para nosotros así como la proclamación de independencia del 27 de octubre.”
Y subrayó: “No renunciamos a ninguna vía para llegar a la independencia de Cataluña. No podemos renunciar a nada. El debate sobre la unilateralidad no es el debate de este momento sino cómo afrontamos políticamente una cuestión política que es el derecho a la autodeterminación”.
Media hora antes, la vicepresidenta del gobierno, Carmen Calvo, había hecho una valoración del encuentro: “No estamos delante de ninguna novedad. El presidente de la Generalitat tiene un proyecto independentista, pero la autodeterminación no existe como derecho en ninguna democracia del mundo. El gobierno de España no abandona la defensa del orden constitucional. El artículo dos de la Constitución reconoce la diversidad territorial como un derecho pero dice que somos un solo estado”.
Hacía dos años que un presidente catalán no ponía un pie en la Moncloa. La última vez que el presidente español y quien preside la Generalitat se vieron frente a frente fue el 11 de enero de 2017, cuando Mariano Rajoy se encontró con el ex presidente Carles Puigdemont para garantizar su presencia en una reunión a la que luego el catalán no asistió.
“Hemos establecido una relación bilateral que tendría continuación en una segunda reunión en Barcelona”, contó Torra mientras la vicepresidenta Calvo confirmaba que el gobierno estará en Cataluña en el aniversario por los atentados del 17 de agosto del año pasado en Barcelona y Cambrils.
“No hay presos políticos en nuestro país”, recordó Calvo en referencia a los independentistas detenidos. A su turno, sin embargo, Torra afirmó: “Sí hay presos políticos y exiliados en Cataluña. A nuestro entender en una indecencia jurídica”.
“No es normal que el señor Torra ratifique la declaración de independencia y que el señor Sánchez lo reciba como si nada”, se quejó Inés Arrimadas, vocera nacional de Ciudadanos, el partido neoliberal que ganó las últimas elecciones en Cataluña pero que no logró la mayoría parlamentaria para poder formar gobierno con aliados. ■