Clarín

El aluvión de series musicales que suenan bien en la TV

Con la ficción sobre Luis Miguel a la cabeza, las grillas se poblaron de historias sobre artistas de distintos géneros. Hay relatos de música clásica, rap, cumbia, de hip hop...

- Patricio Féminis Especial para Clarín

“Los clásicos no pasan de moda. ¡Ésa es la clave! Maestro Armando Manzanero, ¿acepta producir mi nuevo disco, Romance?”. La escena se reveló el domingo 1º de julio en el estreno del undécimo episodio de la ficción musical que es furor en Netflix (casi tema excluyente de los argentinos en las redes sociales cada lunes): Luis Miguel, la serie. ¿Logrará encontrar “El Sol de México” a su madre Marcela Basteri? ¿Cuándo se vieron por última vez y cómo desapareci­ó? ¿Enfrentará el astro a su padre y cruel ex manager, Luisito Rey?

Las respuestas, si bien ya hubo pistas, esperan al episodio final de la ficción que estará disponible el próximo domingo a partir de las 23, por Netflix. ¿Cuántas muertes se revelarán? Su éxito indudable, y allá en marzo el de Sandro de América -que emitió Telefe en curioso formato de tira diaria, teniendo en cuenta que fue concebida como miniserie- reinstaló en la Argentina la pasión por las series (en la TV por cable, el streaming y el On demand) en las cuales la música es la protagonis­ta: biografías de artistas masivos, dramas de caída y resurrecci­ón de músicos del rap, el jazz, el rock, entre otros ritmos.

Pero nadie olvidará uno de los primeros hitos en la TV, entre 1982 y 1987: Fama. La serie sobre los alumnos de danza y canto en la Escuela de Arte de Nueva York. “Ustedes buscan la fama, pero la fama cuesta. Y aquí es donde van a empezar a pagar. ¡Con sudor!”, alertaba la profesora de danza Lydia (Debbie Allen). Y se oía el hit de Irene Cara en ritmo de pop y música disco: “¡Fama! Voy a vivir para siempre. Voy a aprender a volar. ¡Fama!”.

Entre 2009 y 2015, la comedia musical Glee (de Ryan Murphy, el mismo de Ame- rican Horror Story), atrapó desde FOX a nuevas audiencias juveniles. Allí se descubría el talento del coro de una secundaria de Ohio, sin evitar temas como el destape sexual y el bullying. Y desde 2012, la que atrapó a más públicos fue la serie Nashville. Rayna Jaymes, una superestre­lla veterana de la música country, disputaba su gloria con la joven Juliette Barnes.

Ya en 2013 se estrenó en HBO la cuarta y final temporada de la enorme serie Treme, ambientada en Nueva Orleans. Luego del aclamado policial The Wire, el productor David Simon cuenta cómo se reinventa la ciudad, arrasada por el Huracán Katrina, al compás del jazz, los DJ’s y el carnaval de New Orleans. Hoy Treme está disponible en la plataforma on line HBO GO, al igual que Vinyl, sobre las estrategia­s de los sellos discográfi­cos en los años ‘70, en la confluenci­a del punk, el hip-hop y la disco. Costó millones y sólo duró una temporada, pero hoy se la redimensio­na: la produjeron artistas como Martin Scorsese y Mick Jagger. Otra serie ineludible es Empire (se ve en la App de FOX), para saber la historia de ese potente sello del hip-hop, con tono de tragedia de Shakespear­e. Ya en esta segunda mitad de año, FOX Premium lanzará Pose (también de Ryan Murphy). Con un elenco de actores transgéner­o, mostrará la subcultura del ballroom (bailes de la cultura gay) en la Nueva York de fines de los ’80.

La última novedad es un coletazo de la enorme aceptación de la serie de Luis Miguel: el 1 º de junio se estrenó, en Netflix, la ficción José José - El príncipe de la canción, en torno a uno de los íconos románticos de México, en eterna lucha con el alcohol. Esta producción se suma a una atractiva oferta de series de música. Aquí, un panorama de las más recientes. Y pegadizas. ■

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina