En la vereda opuesta de Sampaoli y con críticas hacia los dirigentes
“No me gusta que lo quieran echar dando a conocer lo que gana para que la gente le tome más bronca”, dice.
Hace casi dos años, en su casa en Santiago de Chile, Claudio Borghi decía ante Clarín que lo mejor que le podía pasar a la Selección era no clasificarse al Mundial para tocar fondo y empe- zar desde cero. ¿Exageró?
“Tenés que ver de qué país sos para saber si la clasificación es buena o es mala. Nosotros queremos ganar de cualquier forma, sin planificación, sin idea, cambiando entrenadores... Entonces, la realidad nos pega un cachetazo muy grande”, explica.
-Pudo haber sido peor...
-Es que no sé qué hubiese sido mejor. Los cachetazos te hacen rebelde o te enseñan. Hay que aprender. Nosotros queremos cada cuatro años cambiar una historia, pero es imposible porque en lo previo hacemos todo mal. ¿Cómo vamos a tener buenos resul- tados si hacemos siempre lo mismo? Fue una locura lo que pasó en el Mundial. Me causaron risas los audios, el video de Caruso Lombardi… El personaje está haciéndole demasiado ruido. Eso no me pareció justo.
-Tenías una mirada negativa sobre Sampaoli. ¿Algo más te sorprendió de su trabajo en la Selección? -Desgraciadamente, confirmé lo que yo pensaba. Dejame aclarar algo: tuve una frase desafortunada hacia él en estos días. No quise agraviarlo. Fue una humorada eso que dije del chancho (“En mi barrio le diríamos ‘chancho arriba de un árbol’ porque nadie sabe cómo llegó tan alto”, había dicho). Mi idea no es faltarle el respeto a nadie. Ahora sí contesto: tengo la ventaja de que vivo afuera y veo las cosas desde otra perspectiva. Los argentinos lo ven desde el mismo quilombo. Y a veces cuando mirás desde el quilombo, hay muchas cosas que no vas notando. El fútbol es un producto de la sociedad. Jugamos como vivimos. En Argentina lo único que se hizo en los últimos años fue agrandar el lío con los cambios de entrenadores.
-A Sampaoli le habían firmado por cinco años.
-¿Presentó algún proyecto?
-Estaba muy compenetrado con el Sub 20 y en contacto con el Sub 17 y el Sub 15.
-No sé si él presentó algún proyecto. Pero si lo quieren echar en tan poco tiempo es porque el proyecto se fue al carajo o porque no había proyecto. Tiene que haber un proyecto madre de la federación.
-¿Qué tipo de técnico necesita la Selección? ¿Un Tabárez o Pekerman? -No lo tenemos. Tabárez está con Uruguay. ¿Tendrá intenciones Pekerman de dejar Colombia y agarrar este lío? ¿Te parece?
-Creo que no.
-Yo no sé si José estará interesado. Las presiones en Colombia son muy diferentes a las de Argentina. Vuelvo a lo mismo: no sé qué quiere la federación. -¿Te extraña que quieran echar a Sampaoli?
-Me extrañan las formas, los métodos. Nadie obligó a la AFA a firmar un contrato por tanto tiempo y por esos montos. El tipo quiere cobrar lo que firmó. No puede ser que me arregles un contrato por muchos años y al primer año empezás a buscar el método para echarme. Y tampoco me gusta el método del apriete y del escrache. -¿No te convence cómo se está manejando la ruptura con Sampaoli? -De ninguna manera. No me gusta que lo quieran echar dando a conocer lo que gana para que la gente le tome más bronca. En Argentina se viven tiempos difíciles y hablar de plata es muy peligroso. ■