El incendio que devastó un pueblo en Grecia
Récord. El hemisferio norte registra temperaturas extremas. En Europa, Canadá y Japón hay decenas de muertos.En Grecia, el fuego devoró a un pueblo y a su gente.
En Mati, a 40 km. de Atenas, el fuego que se desató a raíz de la ola de calor que azota a buena parte del hemisferio Norte, dejó poco en pie. La gente quedó atrapada. Más de 70 personas murieron abrazadas en un último intento por protegerse.
Desde el Polo Norte hasta Asia, el calor arrecia en gran parte del mundo en este verano tórrido en el hemisferio norte. Temperaturas superiores a los 40 grados, y hasta 50 en algunos lugares, dejaron decenas de muertos, sobre todoen Canadá y Japón, mientras los incendios forestales han consumido miles de hectáreas en Europa, en especial en Grecia don de la fente quedó atrapada y murió abraandose para protegerse en un dramatico capítulo de este drama.
La ola de calor sorprendió este año en sitios insólitos como Canadá y el Cáucaso. En Europa, el termómetro traspasó los 32 grados en las fronteras de Escandinavia, marcando récords en las estaciones meteorológicas del Círculo Polar Artico. En el área meridional de Noruega, Suecia y Finlandia se reportaban incendios y muertes. También en el Reino Unido. En Italia, las olas de calor se alternaron con mal tiempo, que produjeron además graves inundaciones y daños a la agricultura.
El panorama más dramático se vivía ayer en Grecia, donde las temperaturas de cerca de 40 grados y la fuerte sequía provocaron virulentos incendios al este de Atenas que dejaron ya al menos 74 muertos.
Un centenar de bomberos continuaban buscando eventuales víctimas en esta zona del Ática, presa de las llamas desde el lunes por la noche y seguían recibiendo “decenas de llamadas” de personas en busca de sus familiares, afirmó la portavoz de los bomberos Stavroula Maliri.
En el balneario de Mati, unos 40 km al este de Atenas, 26 cadáveres carbonizados fueron encontrados abrazados en grupos “en un último intento por protegerse”, contó un rescatista, Vassilis Andriopulos. Y son incontables los restos de automóviles y animales calcinados que se ha- llaron en esa pequeña localidad, donde más de 700 personas fueron evacuadas. Estos incendios podrían así superar en víctimas a los que dejaron 77 muertos en 2007.
“La gente está conmocionada, perdida, algunos perdieron todo, niños, padres, casas”, dijo a la AFP Georgia Trisbioti, una portavoz de la Cruz Roja visiblemente emocionada.
“Hoy Grecia está en duelo”, declaró el primer ministro Alexis Tsipras, al anunciar en un mensaje televisivo tres días de duelo en el país. La presidencia de la República anuló los actos previstos ayer para conmemorar el restablecimiento de la democracia en Grecia, en julio de 1974.
Funcionarios locales y residentes describieron un diluvio de llamas sobre la costa oriental de la capital el lunes en la tarde, que sitió a las víctimas en sus casas, en sus vehículos o a algunos metros de las playas adonde se dirigían.
Fuera de Europa, Japón también sufre la agobiante ola de calor. Al menos 77 personas murieron y unas 30.000 debieron ser internadas desde comienzos de julio, mientras a principios de mes más de 200 personas perdieron la vida por culpa de lluvias torrenciales. También en las dos Coreas las temperaturas rozaron los 40 grados.
“Estamos registrando calores sin precedentes en varias regiones”, dijo el lunes por la noche Motoaki Takekawa, un funcionario de la Agencia Meteorológica de Japón. Esta ola de calor “es fatal y la consideramos un desastre natural”, agregó.
En América del Norte la situación se repite. En Montreal, Canadá, se llegó a los 36,6 grados y el calor causó al menos 70 muertos en Quebec.
En Estados Unidos, hubo picos de 40 grados, especialmente en Colorado, Kansas y Oklahoma. Mientras, en Dallas el termómetro osciló entre los 42 y 43 grados, durante al menos cuatro días consecutivos.
Esta serie de anomalías, con calor y precipitaciones extremos, se están incrementando como resultado del cambio climático, atribuida por los científicos a las concentraciones de gases de efecto invernadero, indicó ayer la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Los climas extremos, incluyendo temperaturas récord, olas de calor, sequías y precipitaciones catastróficas, han marcado la primera mitad del verano en el hemisferio norte y han causado efectos generalizados en la salud humana, la agricultura y la infraestructura y han conducido a incendios forestales devastadores, advitriótrió la OMM. ■