Aceiteros buscan revertir una medida con más exportaciones
Desde que la Casa Rosada frenó por seis meses la rebaja a las retenciones a la harina y al aceite de soja, ese complejo industrial, que se siente como una Ferrari andando a toda velocidad, dice que se está quedando sin nafta. La medida, que permite un ahorro fiscal de $ 1.500 millones este año, y 12 mil millones en 2019, generó un ambiente de decepción y pesimismo en el sector. ¿Será para tanto? Mauricio Macri los recibe el martes.
Por cierto, esos empresarios han desarrollado en Santa Fe el mayor polo aceitero del mundo e irán a la Casa Rosada con la esperanza de revertir la decisión prometiendo más exportaciones, entre otras iniciativas. Del lado del Gobierno esperan un ges- to ante la crisis, además de seguir atentos a que la rebaja que implica ese freno en los precios de la harina y el aceite no se traslade en un menor pago al productor.
Los industriales temen que sus plantas, montadas con la última tecnología, queden como elefantes blancos ante el temor a que se exporte el poroto de soja sin procesar.
La harina proteica es el principal producto de exportación del país. En 2017 ingresaron US$ 10 mil millones.
Los industriales señalan que es necesaria una diferencia de precio con la materia prima para procesar el grano. Y apuntan al proteccionismo que aplican los países importadores. China deja entrar al grano y castiga con un arancel de 9% al aceite y otro de 5% a la harina, Tailandia, con el 20% y el 10% respectivamente y Turquía, entere otros, con 15,6% y 5%.
Los empresarios le recordarán al Presidente que Argentina fue pionera hace 15 años en proponer en la Organización Mundial del Comercio la reducción a cero de subsidios, aranceles y derechos de exportación. Pero sucedió todo lo contrario: se incrementó el proteccionismo.
Los exportadores compran el 90% de la soja que se comercializa en el país y según aseguran han pagado en promedio 10 dólares por encima entre enero de 2016 y mayo de 2018.
En el encuentro con Macri hablarán del riesgo a exportar los granos de soja sin elaborar, ya que tienen una alta estacionalidad a diferencia de la harina y del aceite. Así las cosas, la venta de granos de soja declina a partir de septiembre hasta febrero del año siguiente, período en el que disminuye el ingreso de divisas.
En la actualidad, el poroto de soja abona 26% de retenciones; y sus derivados, el aceite y la harina, 23%. Cuando el poroto, cuya carga baja 0,5% mensual, llegue a 23%, todo el complejo sojero tributará lo mismo, hasta converger al 18% en diciembre de 2019. ■