El Gobierno y las provincias del PJ coinciden en el 75% de los recortes
En varios puntos aún no hubo acuerdo. El proyecto 2019 estima una inflación de 17% y un crecimiento del 1,8.
En varios puntos no hubo acuerdo, faltan establecer mecanismos de compensaciones y queda bastante por negociar. Aun así en la Casa Rosada anunciaron el avance de un acuer- do “ya en gran parte del ajuste”, luego de la reunión de tres representantes del Gobierno con los 19 ministros de Economía de las provincias opositoras. Mauricio Macri busca aprobar la ley con un consenso lo más amplio posible para dar una señal a los mercados en medio de las dificultades económicas. Aunque será confirmado a fin de mes, la inflación en el proyecto se encamina a estimarse en 17% para el año próximo y el crecimiento en 1,8% del PBI, todavía sin previsiones para el dólar.
De la reunión en la Casa de Salta, Alejandro Caldarelli -Secretario de Provincias y Municipios-, Rodrigo Pe- na -Hacienda-y Paulino Caballero - subsecretario de Relaciones con las Provincias- se llevaron la presunción de que el recorte que corresponde a las provincias -$ 100.000 millones de los $ 300.000 millones para reducir el déficit a 1,3%- quedó acordado en un 75% con la eliminación del Fondo sojero (unos $ 26.000 millones) y de los subsidios al transporte automotor, por unos $ 49.000 millones, casi la mitad destinados a Buenos Aires y Capital. Los ministros del peronismo, partidos provinciales y el socialismo santafesino pidieron compensaciones para sostener la obra pública, que el Gobierno en algunos casos descar- tó y en otros quedó en analizar.
“Son conscientes de que hay que tener Presupuesto, es una buena señal para que los mercados nos ayuden con el financiamiento”, dijo uno de los funcionarios que negoció por el Gobierno.
Para atenuar el impacto del Fondo sojero (Fofeso), algunos mandatarios peronistas pidieron una asignación extra de un punto de la masa coparticipable del Fondo de Garantía de Sustentabilidad para este año (dejarán de percibir $8.000 millones por el Fofeso) y tres para el año próximo. Los representantes de Nación no lo descartaron, aunque otras provincias lo pusieron en duda: “Eso termina siendo deuda”.
Como adelantó Clarín, la respuesta fue negativa con la eliminación del reparto de los Aportes del Tesoro Nacional ($ 13.000 millones) y la suspensión de la rebaja en Ingresos Brutos: “Firmamos el Pacto Fiscal hace poco y no queremos dar una señal en sentido contrario”. Con los ATN el rechazó fue aún más tajante: “Fue desestimado totalmente”. Tampoco avanzará la suba de la asignación del IVA a la ANSeS.
Otras dos alternativas que en un momento se habían manejado para cumplir con el compromiso de ajuste con el FMI quedaron en el camino. Una era la poda al Fondo de Incentivo Docente, por la resistencia de un sector de las provincias. La otra era el Fondo Nacional de Vivienda. “Está descartado”, aseguraron en el Gobierno, aunque otros rubros de obra pública tendrán que financiarse con recursos de las provincias o los municipios, ya no de Nación.
Los funcionarios macristas a su vez plantearon que las arcas de los gobernadores tendrán ya ingresos adicionales por la quita de los reintegros a las exportaciones y posiblemente el Impuesto a las Ganancias a las mutuales y cooperativas. Las provincias pidieron ampliar la base de recaudación para no enfocarse sólo en el ajuste, y Nación respondió que lo evaluará con la AFIP.
“Tenemos que pensar no sólo en el gasto sino en los ingresos, sin subir impuestos. Argentina tiene niveles de evasión impositiva muy grandes. Y que el esfuerzo fiscal no caiga solo en las provincias y los municipios, sino en todas las jurisdicciones. También en la Nación”, dijo Juan Manuel Urtubey a Clarín.
En algunos casos, como la postergación de la rebaja de Ingresos Brutos, los opositores se expresaron con una postura unificada. En otros las posiciones se bifurcaron de acuerdo a los intereses de cada región o la situación de cada administración.
Carlos Verna (La Pampa), Alberto Rodríguez Saá (San Luis), Alicia Kirchner (Santa Cruz) y Mariano Arcioni (Chubut) aparecen como los más duros para avalar el Presupuesto. ■