Julieta Silva, más complicada: aceptaron agravar la acusación
El tribunal que juzga a Julieta Silva (30) por atropellar y matar con su auto al rugbier Genaro Fortunato (25), aceptó ayer el pedido del fiscal Fernando Guzzo y sumó la imputación de homicidio agravado por la relación de pareja en el juicio que se le sigue en Mendoza. Así quedó habilitada la chance de condenar a prisión perpetua a la joven, con un pena de al menos 35 años de cárcel efectiva.
La mujer está acusada de atropellar a su novio el 9 de setiembre del año pasado a la salida del boliche Mona Bar en la ciudad de San Rafael. Durante las dos semanas de debate, el fiscal y el abogado de la familia del joven rugbier de 25 años intentaron dejar en claro que entre ambos existía una relación consolidada. En cambio, la defensa de Silva buscó desacreditar esa posibilidad y aseguró que era una relación incipiente que no superaba los tres meses.
Para el fiscal Guzzo, los testimonios de diferentes testigos que desfilaron por la sala de audiencias confirmaron la relación de la acusada con la víctima. “Viajaron varias veces juntos, fueron presentados como novios ante amigos y familiares e intercambiaron más de 6 mil mensajes de WhatsApp en los que hablaban de planes futuros de casamiento y hasta tener hijos”, remarcó el fiscal.
Ayer por la tarde, los jueces Rodolfo Luque, Julio Bittar y María Eugenia Laigle aceptaron el pedido del fiscal, añadieron el homicidio agravado por el vínculo como acusación y mantuvieron las otras dos acusaciones, resueltas por la Cámara Penal.
Es decir que Silva podrá ser condenada por alguno de estos tres delitos: homicidio culposo (accidental y con pena menor a 5 años), homicidio simple con dolo eventual (que pudiendo evitar lo continuó y causó el daño, de 8 a 25 años en prisión) y homicidio agravado por el vínculo de pareja (con una pena única de al menos 35 años de cárcel).
Unas 30 personas acompañaron a Julieta en la sala de debate. Por primera vez, a sus familiares y amigos, se sumaron militantes por los derechos humanos en apoyo de la joven. Ella, más nerviosa que en otras audiencias, agradeció el gesto de apoyo y abrazó a cada uno de los que se acercaron a brindarle apoyo. Del otro lado de la sala, el padre, la madre y las hermanas de Genaro, como en cada audiencia, siguieron la resolución del tribunal sin hacer comentarios y con evidentes señas de angustia y dolor.
Este jueves a la 10.30 serán los alegatos de la parte acusadora, el fiscal y el abogado de la familia Fortunato (querella) y de la defensa de Silva. Se descuenta que entonces el fiscal pedirá la pena máxima, y desde la familia de la víctima anticiparon a Clarín que acompañarán esa solicitud. La defensa, en tanto, apunta a que la muerte fue accidental, en busca de una pena que sea excarcelable. La sentencia se espera para el viernes. ■