El día que Macri se resistió al cambio

Cambiar, renovar, modificar un gabinete de ministros es un punto de inflexión para un Gobierno. Ya sea por tratarse de un intento por sobrevivir o bien para dar inicio a una nueva etapa. Una señal a empresarios, políticos, sindicalistas, los mercados, la sociedad y también al mundo.

El fin de semana el ambiente en la residencia presidencial de Olivos fue frenético. Luego de varias jornadas en los últimos días de agosto de “corrida cambiaria”, que obligó al gobierno de Mauricio Macri a recurrir otra vez al FMI para rediagramar el acuerdo, sobrevino la “corrida política”.

Primero fue el planteo, no sólo afuera sino dentro de Cambiemos, de la necesidad de que el Presidente desplazara a su jefe de Gabinete, Marcos Peña, considerado por algunos clave si se quiere renovar al elenco ministerial que acompaña a Macri.

Luego esa posible remoción mutó -sábado y domingo- en el ingreso de al menos cuatro nuevos ministros con un denominador común: todos eran críticos del Gobierno y pertenecen o pertenecieron al oficialismo. Carlos Melconian, Martín Lousteau y Alfonso Prat Gay integraron el Ejecutivo pero se terminaron yendo. Ernesto Sanz, uno de los fundadores de Cambiemos junto a Macri y a Elisa Carrió, en privado suele discrepar con algunas decisiones de la Casa Rosada.

Largas reuniones, discusiones, ofrecimientos y evaluaciones condimentaron las 48 horas en las que parecía que el cambio de gabinete y Gobierno renovado eran inminentes. Sin embargo, la negativa radical a asumir en tres ministerios -Cancillería, Educación y Cultura, y Defensa-, sobre la medianoche del domingo, pareció poner punto final a cualquier intento de cambio.

Ayer en su mensaje, el Presidente omitió hablar de modificaciones en su gabinete; sólo mencionó la reducción de los ministerios. Lo que había nacido como un cambio de ministros para darle aire al Gobierno culminó en algo mucho menor. Los vicejefes Mario Quintana y Gustavo Lopetegui fueron relegados - ocuparán cargos menores- mientras que Andrés Ibarra fue ascendido a vicejefe de Gabinete, dejando Modernización. ■