Los goles llegaron al final en Tucumán aunque ninguno se quedó conforme
Y si no le tienen fe... San Martín de Tucumán logró rescatar un empate de manera agónica ante Gimnasia de La Plata por 1 a 1 gracias a Lucas Acevedo, que estampó con su cabeza la igualdad en los minutos finales del partido. Mauro Guevgeozian había puesto antes en ventaja al equipo de Pedro Troglio, en La Ciudadela.
San Martín mejoró un poco con respecto al juego que mostró en el partido anterior, frente a Rosario Central, pero la igualdad ante el Lobo también le dejó un sabor amargo. Porque Gimnasia, aquejado por el promedio del descenso y que no levanta cabeza luego del triunfo en el debut, era el rival con el que el conjunto de Rubén Forestello pretendía dar el salto de calidad. Pero no pudo.
En la primera mitad, de principio a fin, San Martín se arrimó más sobre el arco de Martín Arias, la figura del Lobo, pero no pudo. Claudio Bieler tuvo la oportunidad más clara, pero su remate se desvió en un defensor visitante y la jugada terminó en el tiro de esquina.
Gimnasia, durante los 90 minutos mostró poco y el partido se encaminaba hacia un 0-0 olvidable. Sin embargo, a cinco minutos del cierre, Guevgeozian (quien había ingresado poco antes por Silva) aprovechó un buen centro desde la izquierda de Matías Gómez y con un frentazo de pique al suelo, superó a Arce.
Parecía triunfo de Gimnasia, pero no. De otra pelota parada vino el empate cuando Acevedo ganó el en área visitante y marcó el 1-1 final. ■