La izquierda sigue ocupando la FUBA y una elección puede resolver el conflicto
Las nuevas autoridades hace casi tres meses que no consiguen desembarcar en la sede de Uriburu al 920.
El 23 de junio pasado, un congreso de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA) que generó polémica consagró a una nueva conducción al frente de la federación estudiantil porteña. Fue luego de 17 años de man- do de la izquierda. Sin embargo, a casi tres meses de aquel día, las nuevas autoridades aún no han podido sentarse en el "sillón de Rivadavia": el emblemático local ubicado en Uriburu 920, donde la federación tiene su sede, sigue ocupado por el Partido Obrero y La Mella. Nadie los quiere desalojar porque creen que el remedio sería peor que la enfermedad.
Ahora, desde hoy habrá elecciones en las facultades. Y ese trámite puede empezar a dirimir la disputa. Además de elegir autoridades de centro de estudiantes, se votarán delegados de FUBA, que son los que luego conforman el congreso anual en el que se elige presidente de la federación.
En las elecciones de junio triunfó el reformismo (integrado por radicales, socialistas, peronistas e independientes), que significó el regreso de Franja Morada al poder. Sin embargo, la vieja conducción doble comando (un presidente por cada partido de la coalición de izquierda) denunció fraude por la manera en que se acreditaron los delegados.
En función de cómo quede la representación de delegados de la FUBA a partir de estas elecciones en las facultades, es probable que el conflicto se allane en un nuevo congreso que, según algunos voceros, hasta podría llegar a ser convocado antes de fin de año. Es decir que en los hechos el congreso de junio podría quedar en la historia como una anécdota de transición.
La temporada de elecciones en realidad comenzó la semana pasada en la Facultad de Veterinaria, donde el E-Vet, brazo estudiantil del Partido Obrero, se impuso con el 72,45% de los votos. Ahora, los ojos están puestos en las Facultades de Farmacia y Bioquímica, Odontología, Ingeniería y “las tres grandes”, Económicas, Derecho y Medicina, donde desde este lunes concurrirán a las urnas más de la mitad de los estudiantes de la UBA para renovar autoridades de Centros de Estudiantes y, también, elegir los delegados de FUBA.
En esta instancia se renovarán en total 71 de los 130 delegados de la federación. El resto de las facultades aún no les ha puesto fecha a las elecciones internas, en un momento de fuerte conflictividad: Sociales, Filosofía y Psicología siguen tomadas con reclamos presupuestarios y salariales, a pesar de que la paritaria universitaria ya fue acordada por todos los gremios, salvo Conadu Histórica.
El Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires avaló el último congreso de la FUBA. A los pocos días hubo un intento de toma del edificio de Viamonte al 400, en el que hubo destrozos. El rector de la UBA, Alberto Barbieri, y el resto de las autoridades del Consejo decidieron ceder el manejo de los apuntes del CBC (hasta ahora en manos de la FUBA) a la editorial universitaria Eudeba.
Desde el inicio del segundo cuatrimestre, la izquierda abandonó los locales que manejaba en las sedes del Ciclo Básico, en las que vendía los apuntes de las materias. Según publicó Clarín en junio, se trataba de ingresos por unos 50 millones de pesos al año.
"Lo económico no nos interesa, pero políticamente no vamos a dejar la sede de Uriburu, porque sería reconocer la derrota en el congreso de junio, que para nosotros fue fraudulento", dijo a Clarín Julián Asiner, uno de los dos presidentes del ala izquierda de la FUBA que pretenden continuar con esta conducción paralela.
En nombre de la FUBA, la izquierda universitaria fue la que se mantuvo más activa durante el reciente conflicto universitario, con una clase pública en Plaza de Mayo y la toma de las facultades más combativas. En las más populosas, como Económicas, Derecho y Medicina (donde pisa fuerte el reformismo), hubo acciones de menor impacto.
El nuevo presidente de la FUBA, Francisco Strambini, dijo a este diario que "a partir de las elecciones de esta semana quedará conformada una nueva representación y se convocará a un nuevo congreso. Por el momento recuperamos los locales del CBC y seguimos esperando por el de Uriburu". Desde el mismo sector aseguran que prefieren no pagar el costo que implicaría un desalojo de esas instalaciones. Nadie quiere cargar con la postal de la Policía ingresando a la universidad. ■