Fundamentaron una polémica condena
Los magistrados señalaron que la fiscalía no logró probar que la acusada, Julieta Silva, tuviera un motivo para matar a su novio Genaro Fortunato, ni tampoco intención. “No pudo ‘no haberlo visto’, pero no, como la ley penal exige, ‘que lo haya visto efectivamente’. Pues el conocimiento exigido para la determinación del dolo debe ser real y efectivo, mas nunca potencial”, escribieron los jueces en los fundamentos. Silva fue condenada a 3 años y 9 meses por homicidio culposo agravado tras comprobarse que atropelló y mató a Fortunato.