Furioso, Cruzeiro se mueve para que sancionen al árbitro y no a Dedé
El presidente del club estuvo en la Conmebol. Y la Confederación Brasileña mostró su indignación por carta.
A lo que fue una jugada clave y polémica en la Bombonera le siguió un día de protestas, reuniones y comunicados. La decisión del árbitro paraguayo Eber Aquino de recurrir al VAR para evaluar la acción de Dedé, defensor del Cruzeiro, y su posterior expulsión desataron una ola de críticas en el fútbol brasileño, lo que derivó incluso en una presentación de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) ante la mismísima Conmebol.
Mediante una carta, la CBF mostró su indignación por lo que consideró “un grave error de arbitraje”, y señaló que Dedé fue “expulsado injustamente por un choque involuntario”.
“Como agravante -dice el texto-, la injusta expulsión ocurrió después de una consulta con el VAR, algo que ocurrió de forma irregular y fuera del protocolo de utilización de la referida tecnología”.
Así, el máximo ente del fútbol brasileño se hizo eco de las quejas del club mineiro, que se sintió perjudicado por la roja a su zaguero.
Autoridades del Cruzeiro, encabezadas por su presidente, Wagner Pired de Sa, se reunieron ayer en Asunción con autoridades de Conmebol. Los dirigentes pidieron la anulación de la expulsión y no pierden las esperanzas de que, tras el contacto con el presidente, Alejandro Domínguez, la entidad no sancione al futbolista y sí lo haga con el juez paraguayo.
Las quejas del Cruzeiro no se vieron atenuadas a lo largo de la jornada de ayer pese a que se supo que Andrada sufrió la fractura de la mandíbula producto de ese golpe. Y hasta anoche, a las oficinas de Boca no había ingresado texto alguno procedente de Belo Horizonte preguntando por el estado de salud del arquero.
Donde sí hubo expresiones de solidaridad fue en un pronunciamiento del Santos de Brasil, que en su momento -en ocasión de su cruce de octavos de final contra Independientetambién se sintió perjudicado por las autoridades sudamericanas cuando le dieron por perdido el partido de ida 3-0 por la mala inclusión del uruguayo Carlos Sánchez. “La Conmebol no decepciona: consistencia! Fuerza @Cruzeiro”, decía un tuit que publicó la entidad paulista.
Y el propio Dedé, expulsado con el partido 0-1 tras saltar a cabecear en el área rival y provocarle a Andrada la fractura, mostró su perplejidad: “La jugada fue fuerte. Del juego. Quien me conoce sabe que no tengo maldad. Fue una jugada de mucha gente en el área. No tuve ninguna mala intención. Ni los jugadores de Boca entendían mi expulsión”, dijo el defensor, de 30 años. ■