Nueva elección y otro referéndum: el debate por el Brexit en Gran Bretaña
La primera ministra podría adelantar los comicios a noviembre. Y la oposición laborista quiere otra consulta.
Elecciones y la posibilidad de un segundo referéndum para aprobar o rechazar el Brexit. El equipo de la primera ministra británica Theresa May está previendo “elecciones anticipadas para el próximo noviembre” como una forma de salvar su “Modelo Chequers” de Brexit moderado, rechazado por la Unión Europea, y su cargo, que está en peligro en la conferencia conservadora de esta semana, en mano de los Brexiters. Una primicia del dominical británico The Sunday Times, que explotó como una bomba en la mañana del domin- go en Londres.
Aunque en este psicodrama británico, las sorpresas no terminan. El líder laborista Jeremy Corbyn admitió, en la conferencia laborista en Liverpool, que acepta que en el manifiesto partidario se incorpore un segundo referéndum para que el electorado apruebe o rechace el acuerdo del Brexit.
Pero la opción personal de Corbyn es una nueva elección general, que probablemente gane el laborismo, tan dividido ante su figura como los conservadores ante May.
Después de que la Unión Europea decidió que Gran Bretaña no sea el ejemplo para imitar para los nuevos populistas europeos que quieran irse de la UE y se unieron en “una emboscada castigo” para considerar “inviable ” el Modelo Chequers que May había construido para consensuar las diferencias ante el divorcio europeo entre los conservadores, la inmediata consecuencia en Gran Bretaña es una brutal crisis política doméstica. Desautorizada, sola, May debe sobre- vivir la conferencia tory del próximo domingo y la avanzada de los Brexitiers, que no disimulan su ambición de eyectarla del cargo.
May debe enfrentar hoy a su gabinete, en una reunión fundamental que va a decidir su futuro político. Los asesores de la primera ministra preparan planes de contingencia para una “elección rápida” en noviembre, para conseguir apoyo del electorado al nuevo plan para Europa.
Según The Sunday Times, May está dispuesta a renunciar el próximo verano europeo. Un movimiento con el que intentan frenar que los euroescépticos, que apoyan una partida de la Unión Europea sin acuerdo, la echen ahora.
En la reunión de gabinete del hoy, el tema será un plan “B” para el Brexit y la inmigración, la razón básica de este desencanto británico con Europa. El ministro del interior Sajid Javid va a proponer quitar a los inmigrantes europeos su status especial preferencial sobre la libertad de movimiento, que ser miembro de la UE les otorga, para reemplazarlo por un nuevo status para inmigrantes de todo el mundo.
A él se opondrá el chancellor de las Finanzas, Philip Hamond, que quiere que se mantenga el status de los europeos para hacer crecer la economía. Si sugiere apoyar la libertad de movimientos europea, va a generar una guerra civil incendiaria entre su partido y el gabinete. Quedan solo 187 días para el Brexit y aún no encuentran el camino.