Bruselas hace una oferta para facilitar el acuerdo post Brexit
El Reino Unido saldrá de la Unión Europea en menos de seis meses. Por las buenas o por las malas. Casi dos años y medio después del referéndum del ‘Brexit’, el acuerdo entre Bruselas y Londres sigue medio crudo y la última propuesta británica fue desechada porque pone en peligro la integridad del mercado común europeo.
Londres sabe que debe avanzar otro plan que le permita una salida amistosa y un futuro acuerdo comercial. Lo contrario sería un suicidio económico y geopolítico: la mitad de sus exportaciones van a Europa, comercia más con Bélgica que con China, y con Francia más que con Estados Unidos. La City londinense nece- sita a la Eurozona. Si no lo hace correctamente, saldría automáticamente de más de 700 acuerdos y tratados internacionales.
Bruselas adelantó en los últimos días una oferta doble. La primera sería un ambicioso tratado comercial sin aranceles ni cuotas que incorporaría apartados de seguridad interior y política exterior. Para desgracia británica, también tendría controles de aduanas y regulatorios que empeorarían la situación actual.
La alternativa sería que Londres se salte sus líneas rojas y acepte continuar en la unión aduanera de la UE. Eso le permitiría comerciar con Eu- ropa como hasta ahora y disfrutar de todos los acuerdos comerciales firmados por la UE pero le impediría firmar los suyos propios. En este momento no hay mayoría parlamentaria en Londres para sacar adelante ninguna de esas dos opciones.
El negociador europeo, Michel Barnier, prepara una declaración política, que podría publicarse la próxima semana y que incluiría la promesa de un comercio “sin fricciones” si Londres cede en sus posiciones. En Bruselas nadie espera que el gobierno británico apueste por destrozar su economía y provocar un caos porque sería la parte más perjudicada. ■